En el año 2017 Rodrigo Fernández Abella juró la pista de Angus en la Expo Prado y entonces aseguró que “esta raza no tiene techo”. Hoy, 7 años después, vuelve a ordenar las filas de los negros y colorados y afirma que “el nivel es exuberante y aumenta cada año”. Más allá que reconoció enfrentarse a sentimientos encontrados, porque por un lado “es una responsabilidad muy grande y un gran honor ser jurado”, pero por otro, “ir a la cabaña, ver los animales, imaginarse que están competitivos y no poder traerlos al Prado, ahí se sufre”, confiesa en tono jocoso. Destacó el sistema de elección del jurado en Angus. “Te proponen los expositores, y se vota. Cuando es reñida, hay balotaje, como este año, a diferencia del 2017 cuando salí con el 50 más 1. Además, te eligen con tiempo, o sea yo sé que voy a jurar en Prado ya el 20 de diciembre. El sistema está muy bueno”. El Ing. Agr. Rodrigo Fernández Abella va a enfrentarse a 241 Angus en la pista. Y lo hará acompañado por su primo Agustín, el martes al ordenar las filas de hembras y con su hermano Santiago el miércoles, cuando se califiquen los machos de la raza más numerosa de la Expo Rural Prado 2024.

-¿Si tomamos en referencia el 2017 a hoy, qué ha cambiado en Angus?

-Hay mayor volumen y destaco sobre todo la homogeneidad en todas las categorías. Ya no hay colas, como en el 2017, cuando además en muchas categorías en el golpe de ojo saltaba un ejemplar destacado y era un claro ganador. Ahora, me voy a topar con muchas categorías que el claro ganador hay que encontrarlo, no es el golpe de ojo solamente, hay que analizarlo, identificarlo y compararlo con el segundo premio. O sea, va a haber matices entre un primero y segundo premio en muchas categorías. Y además, lo que ha pasado también frente al año 2017, es que el tamaño se unificó.

-¿Cómo es eso?

-Me van a ver poco castigando por tamaño, porque se moderó. Hace 7 años teníamos animales grandes de tamaño, y ya se buscaba un animal moderado. Hace tiempo que se busca.

-¿Eso es virtud de la genética que se viene usando, o de del ojo del criador?

-Es virtud de la genética y virtud de los jurados que han venido trabajando hasta hoy, de marcar lo que se debe buscar y los cabañeros siguen ese tipo de animal. Si me voy a la jura 2022, o 2023, el tipo de animal que va a estar arriba seguramente no tiene variaciones con el que voy a jurar ahora. Si bien obviamente que los jurados tenemos matices, por ejemplo cómo usar los datos.

-¿Cómo los vas a usar?

-Van a ser complemento y no siempre. Los miro para afirmar el fallo, y frente a dos animales muy parejos, el número va a pesar.

-Si tienes a un animal que te sedujo de entrada, con el golpe de vista, que tiene clase, que tiene equilibrio, pero los números no lo acompañan, ¿igual le das el premio?

-Depende qué tipo de número. Los datos importantes, de área de ojo de bife virtúan al animal. Los números que impactan, los números buenos, potencian el fallo, más que nada. Tengo un sistema jura que no miro 100% el número de los animales, solamente pregunto en algunos puntuales. Porque esto sigue siendo una jura fenotípica.

-¿Cómo es tu técnica para jurar?

-Mi técnica de jura es comparar, concentrarme siempre en los primeros tres o cuatro. Van a ver que en muchas categorías voy a hacer un corte y concentrarme en esos animales. Para mí son muy importantes los primeros tres premios, no errar ahí. Para eso, me baso mucho en comparar, juntar los animales para comparar.

-Imagino que comparas con un animal ideal que tienes en la cabeza ¿Cómo defines a ese animal ideal?

-Un animal con mucho volumen, pero no solamente costillas, sino que tiene volumen de cuartos, de tren posterior. Y mucha clase. Los animales que van a estar arriba son animales con clase.

-Defíneme la clase.

-Es muy difícil de definirla en pocas palabras, por ejemplo, el golpe de ojo pasa por la clase. A mí lo que me entra en el golpe de ojo es la clase del animal y después le busco el volumen, la profundidad de cuartos, el hueso adecuado. En las hembras voy a buscar el equilibrio entre feminidad y carne. Quien me conoce, sabe que yo no juro por filas en las hembras, me voy atrás, a ver todas las culatas, porque para mí la hembra, en todas las categorías, tiene que ser ancha de atrás. Muchos jurados buscan solamente en el macho el cuarto trasero y esa cadera, ese ancho de bacinete para mí es fundamental en la hembra también.

-¿Qué importancia le das en la jura al golpe de ojo?

-Es un 50%.

-¿Juras pensando en el campo?

-Hay cosas muy importantes que siempre pienso, cuando juro, en trasladar al campo, como un desplazamiento correcto, que para mí es muy importante. Los excesos de gordura en las hembras no son buenos, pensando en la vida útil, en la capacidad reproductiva, sobre todo animales que no cumplieron dos años y no tienen por qué estar preñados, están excedidos de gordura. Ese es un dato que me preocupa mucho.

-Al hablar de lo que marcan los distintos jurados y lo bien que le hace a la raza, ¿El Prado tiene que marcar lo que se busca en el campo o el campo tiene que producir lo que marca el Prado?

-El Prado tiene que marcar lo que se busca en el campo. Después cada criador usa un tipo de toro distinto, pero los toros que uno selecciona en el Prado son toros promedio país. No puedo pensar en buscar un toro, por ejemplo, grande de tamaño, porque ese productor “x” no tiene problema de campo, maneja otras dotaciones, está en campos donde compite con la agricultura. Entonces, yo busco animales promedio. A mí el Gran Campeón que me imagino, es un animal para trabajar en cualquier campo del país. Y creo que ese cambio de genética se está dando. Me voy a enfrentar a mucha genética nacional, ese paradigma se está viendo y la evolución de la raza pasa por ese lado, por el intercambio de genética nacional que está habiendo.

-¿En qué momento está el Angus uruguayo hoy?

-A un nivel excepcional. Me asombra el nivel del Angus de las cabañas nuevas, que hace tres años compiten en el Prado, están a un nivel realmente muy bueno.

-¿A qué lo atribuyes?

-El pelo, siempre lo digo, para mí es clave. Hay cabañas chicas que, si tuvieran pelos los animales, no entrarían en el show. El pelo simplifica todo. Y la genética que se usa es otra. A nivel de machos, por lo que estamos viendo acá en las exposiciones, no tenemos nada que envidiarle a las exposiciones en Argentina.

-¿Qué le faltaría a la raza?

-Marketing. Creo que nos falta más marketing de lo que tiene otras exposiciones, por ejemplo. Mucha gente del exterior no sabe del Angus que tenemos acá. Y mismo los argentinos, son muy pocos los que conocen el Angus que tenemos en Uruguay.

-Quizás tu jura ayuda a eso.

-Ojalá. A este Prado, por lo que estoy viendo en la previa, vendrá mucha gente del exterior y eso es bueno.

-¿Cómo visualizas la zafra que comienza a partir del Prado?

-Nosotros estamos con muchas consultas, eso es buena cosa. Creo que los ganados están entrando mejor a la primavera, lo cual es muy importante y va a marcar que la zafra sea muy demandada al inicio. Hay que tomar en cuenta que se ha adelantado, hay varios remates que son ya en septiembre. Y además, hay mucha vaca preñada y eso ayuda a vender más toros.

-Y el buen momento del criador.

-Exactamente. Eso es algo muy importante, la firmeza que está pasando el criador, es un negocio que está muy solidificado y para comprar toros es muy dependiente de la venta de terneros. Venimos de una muy buena zafra de terneros, no solamente por el precio, sino porque vendió más kilos. Este año al criador le entraron más dólares por ternero que el año pasado, y eso se va a ver volcado en la inversión en toros. En estos días realicé una extensa gira por el remate Angus Family y muchos me decían que sus terneros este año pesaron 30 kilos más que el año pasado y el precio fue mejor además.

-Más allá del volumen que se va a vender, en cuanto a precios, ¿debería ser por lo menos igual al año pasado?

-Yo no visualizo una suba de precios, sí que va a ser una zafra más fluida, con precios similares, pero vamos a cerrar con más toros vendidos.