En el marco de Agro en Punta, uno de los eventos más relevantes del sector agropecuario y turístico en Uruguay, se llevó a cabo el lanzamiento oficial de la marca de Aviturismo en Pastizales, una iniciativa que busca combinar la conservación de los ecosistemas naturales con el desarrollo del turismo rural.
La apertura estuvo a cargo de Daniela Schossler, coordinadora de la Alianza del Pastizal en Uruguay, quien destacó la importancia del trabajo conjunto entre productores, investigadores y organismos públicos y privados para incentivar la conservación de los pastizales naturales. “Este proyecto es posible gracias a un llamado realizado junto al Ministerio de Ambiente y cuenta con el apoyo del Ministerio de Turismo, que lo ha declarado de interés turístico, así como de la Asociación Uruguaya de Ganaderos de Pastizal (AUGAP)”, señaló.
La Alianza del Pastizal, explicó Schossler, agrupa a más de 800 productores de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, con más de un millón de hectáreas bajo su influencia y 18 años de experiencia promoviendo la ganadería sostenible. “Es una iniciativa pionera que surge de la necesidad de proteger el hábitat de aves migratorias que llegan a estos ecosistemas”, afirmó.
El aviturismo aparece como una nueva herramienta para fortalecer esta estrategia de conservación. Según Adrián Stagi, director ejecutivo de Aves Uruguay, este proyecto integra actualmente 19 estancias turísticas, en su mayoría gestionadas por mujeres rurales, y se proyecta incorporar cinco más en el corto plazo. “En cada uno de estos establecimientos hemos identificado especies de aves amenazadas, en algunos casos hasta ocho especies en un solo sitio, lo que convierte a estas estancias en destinos altamente atractivos para observadores de aves de todo el mundo”, detalló.
Stagi resaltó el papel fundamental de la mujer en la historia del turismo rural en Uruguay, mencionando ejemplos como la Sociedad Uruguaya de Turismo Rural (SUTUR) y la Asociación Uruguaya de Guías de Turismo, ambas fundadas en gran parte por mujeres. “Hoy, el aviturismo en pastizales es impulsado por mujeres rurales que entienden la importancia de conservar estos ecosistemas y ofrecer experiencias turísticas auténticas”, dijo.
Y para mostrar cómo se trabaja en esta iniciativa, se presentó un saludo de Mercy Engleman, representante de la National Audubon Society, una de las organizaciones aliadas de BirdLife. Durante su mensaje, destacó el enorme potencial del aviturismo en la región y su impacto en la conservación. “En Estados Unidos hay 70 millones de observadores de aves, de los cuales 40 millones viajan fuera del país para realizar esta actividad. Este proyecto busca capacitar a distintos niveles para aprovechar este mercado creciente”, explicó Engleman.
Además, se resaltó la colaboración con el Ministerio de Turismo de Uruguay, que ha integrado el proyecto en una mesa de trabajo para desarrollar un plan estratégico de aviturismo en el país. “El Ministerio de Turismo tiene 120 años y su misión es proteger las aves y los espacios que las albergan, promoviendo la ciencia, la educación y la conservación en todo el continente americano”, agregó Engleman en su mensaje.
Audubon y sus socios han implementado rutas de aviturismo en varios países de América Latina y el Caribe, entrenando guías y operadores locales para conectar destinos y fortalecer el turismo de naturaleza. “El aviturismo puede generar empleo, atraer visitantes a áreas protegidas y dinamizar la economía local a través del desarrollo de servicios turísticos sostenibles”, enfatizó.
Desde una perspectiva internacional, el proyecto cuenta con el respaldo de BirdLife International, una organización con presencia en más de 130 países, lo que garantiza una promoción global de esta iniciativa. “La conservación de pastizales no solo es clave para la biodiversidad, sino que también abre oportunidades económicas a través del turismo de naturaleza, un sector en crecimiento”, concluyó Stagi.
Antes de la mesa de intercambio, se realizó la presentación de las próximas actividades de la Alianza del Pastizal en Uruguay, entre ellas talleres educativos en escuelas rurales y el Encuentro de Ganaderos de los cuatro países miembros, que se llevará a cabo en octubre en el Central Ganadera y la estancia Santa Laura.
Con este lanzamiento, Aviturismo en Pastizales se posiciona como una innovadora propuesta de conservación y desarrollo rural, que pone en valor la riqueza natural de Uruguay y refuerza el vínculo entre producción agropecuaria y sostenibilidad.
Silvia Castro, coordinadora del proyecto, abrió el panel agradeciendo a los productores que se sumaron a la propuesta. Enfatizó que el propósito del aviturismo es integrar las áreas rurales con el mundo, destacando el valor de los pastizales como un recurso natural y cultural. Resaltó que el proyecto no se enfoca en la construcción de infraestructura hotelera, sino en capacitar a los productores para recibir turistas interesados en la observación de aves. Explicó que ya han realizado visitas técnicas con especialistas para evaluar cada predio y determinar su potencial, destacando que cada establecimiento tiene características y objetivos diferentes. Algunos cuentan con infraestructura hotelera, mientras que otros se enfocan exclusivamente en ofrecer experiencias de avistamiento. Subrayó que la red debe ser mixta y solidaria, para que los productores se apoyen entre sí y fortalezcan la actividad en conjunto. Además, destacó que el 95% de los productores participantes son familias, lo que refuerza la importancia del proyecto en la continuidad del arraigo rural. Para finalizar, compartió una frase que resume la esencia del proyecto: “Mirando al cielo, recuperamos el suelo”.
Maira Soares de Lima, especialista en producción sostenible, celebró el lanzamiento como un paso más en la valorización del campo natural y los pastizales del Río de la Plata. Desde la Dirección Nacional de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos del Ministerio de Ambiente, explicó que se busca alcanzar 200.000 hectáreas con manejo sustentable. En ese marco, se realizó un llamado en el que participaron más de 700 interesados, entre los cuales se seleccionó al grupo de Aviturismo en Pastizales. Destacó el potencial de Uruguay como destino de aviturismo, señalando que el país cuenta con una riqueza de aves reconocida a nivel internacional, aunque hasta ahora el turismo de observación se ha concentrado en la costa y no ha explorado a fondo el interior. También subrayó que la ganadería a campo natural es clave en la conservación de los pastizales, ya que permite mantener la biodiversidad, proteger el suelo y regular el carbono. Explicó que lejos de ser una práctica del pasado, la ganadería bien manejada es una herramienta para la sostenibilidad, respetando los ciclos naturales sin degradar el ambiente.
Gerardo Evia, director de Servicios Ecosistémicos del Ministerio de Ambiente, explicó el papel del Ministerio en la iniciativa y la importancia de los servicios ecosistémicos en la economía. Señaló que el turismo es una forma de monetizar estos servicios, permitiendo que el valor de la biodiversidad se transforme en una fuente de ingresos para los productores. Recordó que la primera forma de monetización de los pastizales se remonta a Hernandarias, quien hace 600 años transformó los pastizales en valor a través del forraje para el ganado. Mencionó el proyecto del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), que canaliza recursos para la conservación de los pastizales y el desarrollo sostenible en el sector agropecuario. Destacó que en esta administración se logró asignar el 50% de los recursos de GEF a iniciativas vinculadas al agro y la conservación. Además, anunció la aprobación de un nuevo proyecto GEF enfocado exclusivamente en la conservación de pastizales, con componentes que incluyen incentivos a la producción compatible con la conservación, identificación de áreas prioritarias, fortalecimiento del monitoreo y evaluación del impacto ambiental. También mencionó el impulso de una posible ley de conservación de pastizales y la importancia del año 2026, que fue declarado por Naciones Unidas como el Año Internacional de los Pastizales y los Pastores.
Por su parte, Alfredo Bianco, presidente de la Asociación Uruguaya de Ganaderos del Pastizal, destacó la relevancia del proyecto para la sostenibilidad de las empresas ganaderas familiares. Explicó que el aviturismo es una oportunidad para diversificar los ingresos sin necesidad de sustituir el uso del suelo. Enfatizó que la rentabilidad de la ganadería a campo natural enfrenta desafíos y que las estrategias de sostenibilidad económica deben incluir opciones como la mejora en la gestión productiva, el arrendamiento para otras actividades agrícolas, incentivos estatales para la conservación del ecosistema, la búsqueda de ingresos extra prediales y la incorporación de actividades complementarias como el aviturismo. Destacó que la existencia de una demanda real y firme de turistas interesados en la observación de aves demuestra que esta actividad puede ser una fuente de ingresos viable para los productores. Resaltó que AUGAP ha trabajado en la reactivación de la Alianza del Pastizal en Uruguay y que iniciativas como esta refuerzan la importancia de la conservación y el valor agregado de la biodiversidad en la producción.
El lanzamiento de Aviturismo en Pastizales marca un hito en la integración del turismo con la producción agropecuaria, ofreciendo a los productores una nueva alternativa económica mientras se protege la biodiversidad. La iniciativa busca transformar los pastizales en un recurso de valor no solo productivo, sino también turístico, fortaleciendo así la identidad y el desarrollo rural del Uruguay.