Se concretó un descenso esperado en la superficie de colza en Uruguay, aunque quizás la sorpresa, fue la magnitud del mismo.
URUPOV presentó su habitual estudio de teledetección de cultivos, esta vez con el foco en colza, que presenta un 99% de precisión. De esta forma, se determinó que en 2023 hubo 184.500 hectáreas de la oleaginosa a nivel país, un 46% menos que en 2022, cuando fue el cultivo “estrella” del invierno registrando casi 350.000 hectáreas.
El 58% de la superficie se encuentra en el litoral, como tradicionalmente sucede, debido a la aptitud de estos suelos para la agricultura. Soriano, con un 17% fue el departamento que más chacras de colza tuvo, seguido por Río Negro con un 15% y Paysandú y Colonia en el eje del 12%
Ya son conocidas las complicaciones que tuvo el cultivo en 2023 para su desarrollo productivo, que terminó estableciendo un promedio de 1.596 kilos por hectárea según los datos de DIEA. Esto se debió a problemas de heladas, insectos e implantaciones que no funcionaron de la forma planificada, y en muchos de esos casos, en lugar de resembrar de forma tardía, se hicieron chacras de trigo o de cebada.
A su vez, el aspecto más determinante fue el precio, ya que en los últimos meses osciló en el entorno de los US$ 400, al tiempo que en 2022 llegó a superar los US$ 700.
Hay también un interesante dato que plasma Urupov: 172.065 hectáreas del 2023 no fueron colza en 2022, pero 332.198 hectáreas de colza de 2022, no lo fueron en 2023.
Este último dato refuerza especialmente el hecho de no realizar colza en una chacra con antecesor colza, sobre todo por motivos sanitarios para las rotaciones.