El Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) realizó un informe donde concluyó que los eventos climáticos extremos y los conflictos armados entre países están entre los principales riesgos inmediatos para el 2025 en el mundo.
Según publicó Bloomberg y consignó Agro del Sur, el director general del Foro Económico Mundial, Mirek Dušek, manifestó que “el aumento de las tensiones geopolíticas, la fractura de la confianza mundial y la crisis climática están tensando el equilibrio del sistema global como nunca antes”. En este sentido agregó: “En un mundo marcado por divisiones cada vez más profundas y riesgos en aumento, los líderes mundiales deben elegir entre fomentar la colaboración y la resiliencia, o enfrentarse a una inestabilidad cada vez mayor. Las apuestas nunca han estado tan altas”.
Es clave considerar que este tipo de hechos pueden significar coyunturas económicas desafiantes con importantes movimientos de bienes, como por ejemplo los provenientes del sector agropecuario.
La vigésima edición del Informe de Riesgos Globales mostró que los conflictos armados son el mayor riesgo para que desate una crisis material a escala mundial en 2025 según el 23% de los consultados, seguido por eventos climáticos extremos con un 14%.
Según el Foro Económico Mundial, “los riesgos medioambientales dominan las perspectivas a largo plazo, con los fenómenos meteorológicos extremos, la pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas, los cambios críticos en los sistemas terrestres y la escasez de recursos naturales a la cabeza de la clasificación de riesgos a 10 años”, estableció el informe.
En tercera instancia aparece el riesgo a una confrontación geoeconómica con un 8%, seguido por la desinformación y la información errónea con 7%, la polarización social con 6% y la recesión económica con 5%.
Más abajo aparecen como riesgos para 2025 los cambios críticos de los sistemas terrestres en un 4%, la falta de oportunidades económicas o desempleo con 3%, la erosión de los derechos humanos y/o las libertades cívicas y la desigualdad, ambos con 2%.
Más de la mitad de los encuestados prevén cierta inestabilidad en los próximos dos años, reflejo de la fractura generalizada de la cooperación internacional, al tiempo que casi dos tercios de los encuestados prevén un panorama mundial turbulento o agitado para 2035, impulsado en particular por la intensificación de los desafíos medioambientales, tecnológicos y sociales.
