El magnífico edificio del Banco República en Ciudad Vieja puso el marco para un día de celebración. Pero lo mejor de todo es que no solo fue el anfitrión del acto de la inauguración, sino que ahora será custodio del Museo del Gaucho y la Moneda.
El pasado jueves 3 de octubre, con un marco de público espectacular entre el que se encontraba el presidente de la República Luis Lacalle Pou, el BROU inauguró el Museo del Gaucho y la Moneda en su nueva locación.
“Es una jornada especial, una instancia que reafirma otra vez como el Banco País se conecta con la sociedad”, comenzó diciendo Salvador Ferrer, presidente de la institución.
En este sentido, el jerarca dijo que el Banco República se acerca a la población de 3 formas: proveyendo a clientes de soluciones financieras y cumpliendo el mandato institucional de ser socios en el desarrollo económico de personas, familias y empresas; cerca de todos los uruguayos con resultados y aportando el beneficio de las rentas generales y el tercer aspecto es generando comunidad.
“Hay un estrecho vínculo entre el BROU y la cultura, comenzando por el aspecto edilicio: las sucursales a lo largo y ancho del país son patrimonio, como en esta casa”, dijo Ferrer haciendo alusión al lugar del evento y donde se encontrará el museo. “El banco ahora será custodio también del Museo del Gaucho y la Moneda”.
En este sentido, el presidente del BROU dijo que el museo en su anterior locación era el más visitado por niños y escuelas, pero por problemas edilicios cerró sus puertas en 2019. El palacio Heber Jackson en 18 de julio y Herrera, en Montevideo, está siendo refaccionado por estos momentos.
“Desde el primer día me incomodó ver este gran hall vacío, y Ana Ribeiro fue la persona indicada para tomar las riendas de la tarea”, expresó Ferrer. “El cariño y las ganas que le ha puesto permiten que hoy tengamos este museo espectacular”, agregó, entre aplausos. “Está dentro de un edificio que es como un museo más, así que podemos decir que hay 3 museos aquí”.
Conjuntamente con distintos agradecimientos, dentro de los cuales destacó a todo el equipo y directorio del BROU, así como la fundación del mismo o el estudio de arquitectos, Ferrer destacó que el trabajo superó las expectativas.
Como dato de color, en el museo se podrá disfrutar por 6 meses del cuadro de Blanes de un gaucho en el campo que apareciera hace poco.
“Los uruguayos pueden confiar en un banco sólido, activo y comprometido con su mandato. Tenemos ahora un museo para el disfrute de la sociedad, que podemos inaugurar en la previa del Día del Patrimonio”, cerró.
Barro, paja y cuero. Ana Ribeiro, subsecretaria del Ministerio de Educación y Cultura, se mostró feliz y agradecida con el museo y también con el evento de lanzamiento.
“Desde fines del siglo XVIII los museos buscan cantar y contar la historia de una nación, de esta forma afirmarla y generar sentido de pertenencia en la gente”, comenzó diciendo. “Hoy hacen algo distinto. Los museos son sitios de disputa cultural, por aquí pasan las demandas ecologistas, la necesidad de dar visibilidad a las minorías o gente que protesta cometiendo la atrocidad de tirar pintura a los cuadros”, sostuvo.
Por este motivo, “los museos no pueden quedarse viejos, tienen que ir variando su relato”.
En este sentido se recordó a Alicia Brasesco, quien estaba a cargo del museo en su anterior locación y con motivo del pedido de pase en comisión, surgió la idea de este relanzamiento y poder ubicar el proyecto en este nuevo lugar para que disfruten los visitantes.
“Un día Alicia me dijo que salió del museo en 18 de julio y los estudiantes pensaban que el gaucho era rico por la platería, siendo que su origen es precisamente la austeridad más absoluta. Había que dar vuelta el relato, y es lo que intentamos”, dijo Ribeiro.
La subsecretaria de Educación y Cultura dijo que dentro del museo se busca contar también lo que sucedió con las minorías, como es el caso de las “chinas”, de quienes se ha hablado menos. “Estaban en segundo lugar, un poco escondidas”, afirmó.
La construcción de nuestra sociedad, en momentos consagratorios, ha tenido al gaucho como protagonista. “Explicamos por qué el gaucho a caballo tiene rasgos indígenas, por qué se elige el gaucho caucásico. En este museo aceptamos el desafío de dar la batalla cultural”, sostuvo.
Para cerrar, Ribeiro destacó la labor de los arquitectos, quienes supieron hacer el trabajo sin perder la magnificencia del edificio, “haciendo un homenaje al barro, las pajas y el cuero”.
“La solidez económica e institucional del país también representa al gaucho, que tuvo el coraje suficiente de acompañar la lucha de la independencia, dejando su legado”, remató Ana Ribeiro.