La lucha contra la garrapata, uno de los principales problemas sanitarios del rodeo bovino en Uruguay y la región, sumó un nuevo capítulo con la puesta en marcha de un plan piloto de vacunación. Representantes de la Academia Nacional de Veterinaria, la Sociedad de Medicina Veterinaria, la Facultad de Veterinaria de la UdelaR y el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) participaron en un encuentro en el Institut Pasteur de Montevideo para conocer de primera mano los avances del proyecto.
La iniciativa es liderada por Scaffold Biotech, startup fundada por los investigadores Agustín Correa y Matías Machado, en el marco del programa LAB+ del Pasteur y con apoyo de Ficus Advisory. La empresa trabaja junto al MGAP en el desarrollo y validación de una vacuna que busca convertirse en una herramienta clave dentro del Plan Nacional de Lucha contra la Garrapata.
Según explicó Correa, la garrapata genera pérdidas anuales estimadas en 95 millones de dólares en los países del Mercosur debido a las enfermedades que transmite. La estrategia más utilizada por los productores ha sido el uso de acaricidas, aunque su efectividad se ha visto comprometida por la aparición de cepas resistentes, con impactos negativos sobre el ambiente, la inocuidad de los alimentos y el acceso a los mercados internacionales.
La vacuna propuesta funciona inoculando a la vaca con un antígeno del parásito, que induce una respuesta inmune capaz de afectar la fertilidad y supervivencia de la garrapata al alimentarse del animal. En pruebas a campo realizadas en Rivera se logró un 90% de eficacia. A partir de noviembre, comenzará un ensayo piloto en 11 establecimientos distribuidos en ocho departamentos, con diferentes niveles de infestación. El plan se extenderá hasta abril de 2026.
Manuela Cilintano, directora técnica de la empresa, subrayó que la vacuna no sustituirá a las prácticas actuales, sino que formará parte de una estrategia integrada. El esquema propuesto contempla tres dosis, aplicadas con una periodicidad de seis a doce meses.
Durante la reunión se plantearon interrogantes sobre la administración de las dosis en el marco del piloto, que quedará en manos de personal del MGAP con apoyo de la startup y del Pasteur. También se discutió la importancia de manejar las expectativas de los productores para asegurar un uso correcto y sostenible de la vacuna.
El encuentro culminó con la reafirmación del compromiso de todas las instituciones involucradas en continuar el trabajo colaborativo para que el ensayo piloto se concrete con éxito y siente las bases de una herramienta innovadora en el combate contra la garrapata en Uruguay y la región.