Chicago consiguió cerrar este viernes con avances diario, semanal y mensual tanto en cereales como en soja.
La oleaginosa y el trigo se recuperaron de ventas obligadas por vencimientos de contratos, por lo que se efectivizó la entrega de producto disponible en Chicago. Las pérdidas que siguen acumulándose en el dólar también aportaron su cuota de responsabilidad al caer a su menor valor desde agosto de 2015. Las últimas semanas han visto fondos de inversión entrando en masas en los mercados de futuros de granos. De hecho, en el dato semanal medido hasta el martes 19, los fondos habían profundizado su posición neta comprada en soja, mientras que en maíz recortaron sensiblemente su posicionamiento vendido. Se espera buen tiempo en EEUU así como en Argentina y Uruguay para la presente semana, lo que debería permitir avanzar con los trabajos de siembra y cosecha respectivamente.
En los demás mercados financieros, la FED volvió a dejar sin cambios las tasas de interés, aunque ahora empezando a cambiar su foco de atención desde la economía mundial a la mayor firmeza de la estadounidense. El Dow Jones cayó este viernes, ante resultados trimestrales que no consiguen llamar la atención de los inversores. El oro siguió subiendo de forma impresionantes, mientras el crudo aflojó algo desde los máximos recientes, de los últimos meses.
El maíz cerró arriba, ayudado por noticias de ventas de exportación, tanto en el reporte semanal correspondiente como en ventas diarias anunciadas. Durante el jueves se conoció el dato de la mayor venta semanal del presente año. La situación problemática en Brasil, de falta de maíz de primera por exceso de exportaciones, así como la incertidumbre sobre el desempeño del de safrinha, debido a la seca persistente en ese país, parece haber empezado a mover a los compradores del cereal hacia EEUU, incluyendo las industrias brasileras avícola y de cerdos. Este lunes se conocerá el dato semanal de siembra en EEUU, el que se espera ronde el 50%, pese a las lluvias de la última semana, contra 30% de promedio histórico a esta altura.
La soja subió arriba, mostrando una firmeza inusitada y un mercado que pese a las ventas obligadas por vencimiento de contratos (y con ello, entrega de producto final), igual logró dar vuelta la pisada y cerrar alcista. Se mantiene el cálculo de pérdidas en soja de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, aunque no se descarta en absoluto un aumento en este recorte. Al momento, la entidad calcula en 56 millones de toneladas la producción argentina, por debajo de las 60 millones estimadas hasta sólo hace un mes atrás. La soja se mantiene en territorio sobrecomprado, tanto en el contrato mayo como julio, lo que podría activar ventas por aspectos técnicos.
El trigo cerró con ganancias moderadas, tomando firmeza desde soja y maíz, así como del dólar debilitado. Los pronósticos climáticos indican mejoras para la presente semana, con el trigo de invierno espigando y las reservas de humedad óptimas, de cara al inicio del llenado de grano.
FIMIX – Agrofinanzas