
Volvió Rincón de las Mulas, y lo hizo por la puerta grande, reflexionó Alejandro Zambrano Zerbino tras dispersar la totalidad de la oferta de la cabaña en poco más de hora y quince minutos en el local “Santa Bernardina” de la Sociedad Rural de Durazno. Con agilidad, entre un muy buen número de clientes, se comercializó la genética, a buenos valores, que reflejan la demanda por estos Angus, que ya entraron a pista prácticamente todos con pre ofertas.
Los 39 toros hicieron promedio en US$ 3.135. Fueron 33 toros de pedigree: 4.680, 2.400 y 3.178 y 6 toros SA: 4.200, 2.400 y 2.880 de promedio.
Además, se vendieron los 57 vientres a un valor medio de US$ 854: fueron 10 vientres de pedigree: 1.560, 960 y 1.200 y 47 vaquillonas SA: 816, 744 y 781 de promedio.
“Hubo bastantes clientes en vivo en el lugar y también muchos operaron a través de los teléfonos, con mucha puja, sobre todo en algunos toros muy destacados, todos respaldados con muy buenos datos de Epds y 22 años trabajo en al venta de reproductores”, mencionó Alejandro Zambrano.
Al final de la subasta la puja se acentuó, “un denominador común de esta zafra 2024 que claramente está muy demandada afortunadamente”.
Y ahora, tras esta venta, Rincón de la Mulas está con la mira puesta en el 2025, “porque los clientes están, y quedó demostrada que su genética es buscada”, dijo Zambrano.