El consignatario de ganado, Gustavo Basso, expresó que actualmente en el mercado de haciendas gordas existe “una situación de perdida de confianza por parte de los productores hacia el mercado, hay una molestia muy importante que se manifiesta en todo momento”.

Entrevistado en Valor Agregado de radio Carve, el consignatario sostuvo que esta situación genera “una menor concreción de negocios, pero con un final que es inexorable, a medida de que vamos llegando a fin de año las necesidades de liquidez y productivas son inevitables”.

En este escenario, los precios se ubican en US$ 2,70 para las vacas y US$ 2,90 para los novillos, pero “los negocios que vamos concretando son de plantas que tiene un poquito más de flexibilidad y llegan a los US$ 3,00 o US$ 3,05 por el novillo”, expresó Basso.

En estos valores, la posición del productor es de resistir y no vender, “amparado en un momento que es de los mejores de los últimos años en disponibilidad forrajera”.

Consultado por la relación entre el precio de la tonelada de la carne exportada y el valor del ganado en nuestro país, el consignatario sostuvo que se siente con la “autoridad moral de poder decir que estamos en un momento en el que la industria está con una sonrisa de oreja a oreja con los resultados que está obteniendo”.

“Habrá que ver si este mercado cumple con los objetivos, yo siempre confío en el mercado libre y creo que más acá o más allá los valores se alinean con la realidad”, agregó.

Sobre la adquisición de Minerva de Frigorífico BPU, Basso sostuvo que “todo colabora cuando hay una concentración de la demanda, el poder comercial que ella otorga siempre influye en la formación de los valores y en el normal desarrollo de los mercados”, “la salida del grupo japonés es lamentable, y afecta desde todo punto de vista”.

Para la posibilidad de que Minerva adquiera tres de las cuatro plantas que tiene Marfrig, el operador del mercado indicó que su visión se encuentra en la misma línea que lo anteriormente mencionado, “yo creo que eso no suma, eso resta a la libre la competencia”.

“También es honesto reconocer que en otras cadenas de valor hay concentraciones mayores”, concluyó Basso.