Algunos, lo llaman efecto “subibaja”, otros, efecto “yo-yo”, lo cierto es que el mercado lanero australiano no encuentra la estabilidad necesaria como para mantener firme una tendencia; lo suficiente, como para que los diferentes integrantes de la Cadena Textil Lanera vayan perdiendo la incertidumbre (a causa de efecto de la pandemia) que ha golpeado fuertemente durante el año pasado y poder planificar su actividad de cara a los meses próximos.
José Luis Trifoglio, de Zambrano & Cía, informó que nuevamente se demuestra la debilidad y sensibilidad que tiene el sector de lanas medias y gruesas, ya que en general cuando el mercado se debilita como en esta semana, los porcentajes de baja son superiores en el rango de micronajes que va desde las 26 micras a más gruesas.
El Indicador de Mercado del Este bajó 14 centavos de dólar americano y se ubicó el nivel de USD 9,91, es decir 1,4% por debajo del cierre de la semana anterior. La oferta semanal, que incluyó nuevamente una selección de lanas Merino producidas en N. Zelanda, totalizó 34.500 fardos aproximadamente, de los cuales se vendió el 87,5%.
El precio máximo de esta semana correspondió a un fardo de lana de 13,6 micras de diámetro promedio, 63 mm de largo de mecha, 0,7% de contenido vegetal, 35 N/Ktek de resistencia a la tracción y 78,5% de rinde al peinado, y la empresa Tianyu Wool Industry (China) a USD 35,92 por kilo base sucia.
Mercado local con reducida operativa, demanda interesada en lotes finos con alguna certificación
La situación en el mercado local no ha registrado cambios. La demanda está interesada en algunos tipos de lana, en particular lanas muy finas con algún tipo de certificación, ya sea orgánica o de bienestar animal, pero los volúmenes comercializados no han sido muy significativos en las últimas semanas.
Por los demás tipos de lana, si bien la oferta es mayor, la demanda es muy selectiva, ante la disminución de los pedidos del exterior por estos tipos de lana y en el intento de comercializar algunos lotes, observamos que existe una diferencia entre los precios que vienen del exterior y las expectativas de los productores, no permitiendo esto que se arme una corriente de negocios fluida. Por tal motivo, la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana del Uruguay, esta semana no publicó su planilla de precios.