“Vinimos para romper viejos mitos y crear nuevas normalidades”

-¿Cómo evalúa los primeros meses de gestión?

-El comienzo fue un torbellino. Quedé bastante impactada por el apoyo recibido al asumir la presidencia de la Federación; no solo las felicitaciones y lo que significó para el entorno, sino el apoyo recibido fue un torbellino que me llevó. Fueron muchos llamados y me dio la pauta de lo que significa la Federación Rural. Comenzamos un año, todavía en pandemia, con esperanzas de que saliéramos a algo mejor, lógico que fue bien difícil. Experiencia tenía, porque estuve en la presidencia de Asociación Agropecuaria de Salto, pero tuvimos que asumir funciones con un mundo en pandemia. En 2021 las cosas se encaminaron, comenzamos con un cambio en la titularidad del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, del equipo de Sanidad Animal. En seguida que asumió el ministro (Fernando) Mattos nos visitó y comenzamos a organizar para ver cómo iban a seguir las cosas. La Federación Rural trabaja fuerte con el combate contra la mosca de la bichera. Tenemos un gran interés por sacarlo adelante. Es de esas cosas que tenemos bien marcadas. Ojalá que esto salga a la brevedad, a efectos del sector ovino y vacuno, pero también para los humanos. Para eso seguimos con reuniones, con grupos de trabajo que están apoyando. El próximo martes 25 tenemos reunión de Campo Unido y ese es uno de los temas. Esperemos siga con fuerza y se consiga.

-Al pasar mencionó que se dio cuenta de lo que significa Federación Rural. ¿Qué sería?

-Federación Rural tiene una trayectoria larga, de muchos años, es una institución que la gente la tiene presente. En Uruguay, en otras instituciones es tenida en cuenta, tiene una trayectoria, tiene historia. Todos trabajamos y somos del interior, pero la Federación tiene su sede en Montevideo. Siempre nos reímos de eso. Es debido a ese centralismo que existe que hemos propuesto salirnos de la capital, encontrarnos en el interior, mediante otros medios. Así sucedió con el Congreso Extraordinario, dado que el congreso normal no se hizo ni en 2020 ni en 2021. Fue un año de cambios. Se presentaron dos listas, dos listas encabezadas por dos mujeres, hicimos el Congreso virtual. Me gusta eso, porque muchas veces se cree que los productores, la gente de campo, no estamos aggiornados y rompimos con esos mitos. Primero fuimos dos mujeres a la cabeza, fuimos elegidas por los grupos internos de Federación. Tampoco es habitual que hayan dos listas. Eso genera una preocupación de querer saber qué estaba pasando, quienes estaban en esos grupos. Ambas teníamos un grupo detrás apoyándonos. Eso tiene una incidencia y lo destaco para reivindicar el labor del hombre en el medio rural y en el gremialismo. Por eso, vinimos para romper viejos mitos y crear “nuevas normalidades”.

-¿Cómo se conjuga la labor diaria, de productora, madre de familia con el trabajo gremialista?

-En mi caso está bastante solucionado ese tema porque tengo hijos grandes con sus vidas encaminadas, más allá de que como madre no dejamos de preocuparnos. Tengo tres nietos varones. Un hijo está en Montevideo y otro que terminó su carrera y está estudiando en Barcelona. Con la empresa sí se complica por los viajes, por los tiempos. Aprendí a derivar, a derivar en mi casa y a derivar dentro del grupo. En mi caso lo condicioné así. Hay momentos en los que el ida y vuelta no es fácil, si yo no estoy está otro de los integrantes. Somos varios que empujamos para lograr la presidencia y así lo trabajamos. Además al virtualidad que obliga la pandemia nos llevó a trabajar por esa vía también. No empezamos a trabajar así por la pandemia, el sistema de Federación ya venía apuntando a eso porque estamos todos desparramados por el país. Esta semana, por ejemplo, no podía salir porque venían a levantar la lana, porque tenía que entrar ración para darle a los animales en plena sequía.

-En ese sentido, ¿cómo evalúa el accionar del MGAP con la emergencia agropecuaria?

-Bueno, llovió. Los escucho y me acuerdo de Marcelo Pereyra de sus lecciones y todo el trabajo imponente con el campo natural. Es impresionante. Reviví algunos vídeos y audios del Plan Agropecuario y del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria. Uno tiene que escuchar nuevamente. En tres horas de agua ya tenemos resultados. Yo tengo parte del campo sobre basalto superficial y un poco de agua ya te cambia la vista. Sí es cierto que demandamos más agua. No fui una de las más beneficiadas, me llovieron 60 mm en dos días. Estamos con problemas de agua en aguadas. No solo es el verano, venimos de un año que no fue el más lluvioso y sin dejar de recordar la seca del año pasado, que fue muy dura. Este año pegó más a la zona norte. Pero nos avisaron. Advirtieron que el efecto Niña estaba instaurado, pero parece que va a aflojar. Se generó un grave problema de agua, pero la reacción del Ministerio ha sido rápida. Entiendo que hay disconformidad en donde algunas seccionales, como en Rocha y Artigas, que no fueron incluidas, pero el accionar fue rápido. Está toda la información en web, hay soluciones. Es importante ponernos a racionar, porque los animales así lo van a demandar. Hay animales en malas condiciones, la zona agrícola está mejor y pienso que la soja va a salir adelante. Para el ovino es otra historia, la seca le viene bien por temas sanitarios. En vacunos esperemos que el agua ayude. Habrá que poner más trabajo y reforzar, porque estamos en pleno entore y estos calores han sido agobiantes.

-¿En qué trabaja actualmente la Federación Rural?

-El 20 de diciembre fue la última sesión y retomamos el trabajo el próximo 7 de febrero. Sin embargo, estamos en permanente atención. Estos días han sido conflictivos con el tema de los incendios en Río Negro y Paysandú. Son situaciones estresantes, preocupantes. Estuvimos y estamos en alerta. Hay cosas que corregir y analizar. Seguimos haciendo hincapié en trabajar con el Plan contra la mosca de la bichera. Va a ser un adelante y un después en el campo.

-Mencionó que lo referido a la sanidad es de las principales preocupaciones. ¿Qué lectura hace de la situación?

-El tema se tiene que solucionar con diálogo. Los productores nos tenemos que poner de acuerdo. Estamos convencídisimos que sería un antes y un después el solucionar la mosca de la bichera. No hablo sólo de la bichera en ovinos, también está en ovinos, en vacunos, en humanos, en perros… es una oportunidad que hay que aprovecharla. Dijimos que sí, que la campaña debemos financiarla los productores. La considero una inversión, no un gasto. De solucionar este flagelo, ganamos tiempo para dedicarle a otras cosas. Tenemos que hablarlo, ponernos de acuerdo y tener un plan en común. Hay que conversar. Hay acuerdo, pero quedan dos o tres ítems para revisar.

-De los encuentros que tuvo con el presidente Lacalle Pou, ¿qué le llamó la atención de él?

-Su calidad. Es un presidente que le gusta estar presente. Es un tipo muy llano. Tenemos una reunión pactada con su equipo y si tiene otros compromisos se arregla y asiste. Eso llama la atención. El se mueve, el está. Habla distendido, con comodidad. Es un mano a mano. Fuimos recibidos en el ministerio de Industria, hablamos por el tema de los combustibles,, nosotros tenemos una posición ya tomada que viene del consejo anterior. Que nos escuchen no tiene precio. Sobre todo porque pasamos mucho tiempo sin ser escuchados. Fuimos los malos de la película durante muchos años. Hoy trabajamos con gente que entiende que la producción del agro es el principal recurso del país. Si bien los tiempos del Estado siguen siendo lentos, y todavía tenemos muchas cosas pendientes y la pandemia nos ha retrasado en algunas cuestiones, la situación cambió. Todos pensábamos que estábamos de la pandemia, porque veníamos de un año de mucho trabajo y ahora hay sectores parando. Nos angustia mucho. Volvemos a hablar de seguros de desempleo. Ojalá que a todos nos vaya bien, porque siempre nos perjudica si al otro le va. Me desespera la incertidumbre de no saber qué nos espera mañana.

Federación Rural envió una carta al Congreso de Intendentes, tras recibir “fuertes reclamos” de los productores por los aumentos que aplicaron los gobiernos departamentales en la Contribución Inmobiliaria Rural, Contribución Urbana, Patente de Rodados e Impuestos Domiciliarios.

Sabemos que algunos de estos tributos son fijados por el Poder Ejecutivo, salvo los beneficios y bonificaciones de buen pagador y pago contado que los realizan los propios gobiernos departamentales. Algunos de estos beneficios no se han aplicado en este período, por lo tanto, solicitamos la revisión de los mismos para que no cause el impacto económico que hemos recibido”, dice la misiva de la gremial. Agrega que “algunos gobiernos departamentales no retornan estos aportes con obras para sus contribuyentes, lo que incide en la vida sobre todo el sector rural, por servicios deficientes”.

Finalmente, la gremial sostiene que “el sector agropecuario, a pesar de sus buenos precios tan promocionados, tiene serios problemas de competitividad, dados los altos costos que sufre, incluidos los aportes que debe realizar al Estado en sus diferentes formas”. Les aclara a los intendentes que “resulta difícil trabajar y producir en este escenario, con una seca instalada fundamentalmente en el norte, que puede condicionar la producción a futuro”.

“Se está recargando nuevamente a la gente. En general, no puedo decir que todo, pero se han aumentado los impuesto más allá de la posición del gobierno de no hacerlo. Seguimos luchando por la competitividad, hablamos de precios fabulosos pero cuando llegan al productor no nos da. Están condicionando a la producción y muchas veces nos privamos de hacer cosas porque los números no dan”, señaló Mónica Silva, presidenta de la FR, al respecto.