Con mucha experiencia en selección de reproductores de razas productoras de carne, el Dr. Pablo Zerbino Vanrell tendrá la responsabilidad de ordenar las filas de Angus en la próxima Expo Prado. En jornadas que dijo, más allá de la responsabilidad, son para disfrutar, realizará su tarea acompañado por su hermano "Nacho", su hija Lucía, su sobrino Alejandro Zambrano Zerbino y su yerno Mateo Barragán. En diálogo con Rurales El País, describió cómo llevará adelante su trabajo: vamos a buscar animales: armónicos, balanceados, sólidos, carnudos, crecedores y de desplazamientos fáciles. Además, el Dr. Zerbino definió a su Angus ideal en ambos sexos: cabeza chica, cuello largo, con una buena inserción de paletas, musculosas pero que no protuberantes, procurando función y facilidad de parto. Largo de tronco, lomos anchos y firmes, buenas caderas, llenas de carne, cuartos anchos y bien descendidos (calzonudos). Miembros fuertes, bien aplomados, articulaciones con buena elasticidad, libres de vejigas, pezuñas bien desarrolladas, sanas, simétricas y con buena angulación, ni paradas ni apoyando los pichicos. Con buen nivel de preparación, sin excesos,
¿Qué representa ser jurado Angus en la Expo Prado?
Es sin dudas un gran orgullo y honor ser elegido por los expositores para ordenar las filas. Siento también una gran responsabilidad por esta tarea, ya que de alguna forma está en juego el esfuerzo, la dedicación, y el trabajo minucioso de mucho tiempo del cabañero y sus colaboradores, generando en su equipo, una gran expectativa por cada uno de los animales que entra a pista. Sé que va a ser un trabajo arduo, la raza Aberdeen Angus ha crecido en volumen exponencialmente en los últimos años, así como también ha levantado el nivel genético acompañado de una importante profesionalización en la preparación y puesta a punto de los individuos en pista. Hemos participado en las últimas exposiciones de Durazno y Flores comprobando una vez más el altísimo nivel exhibido por los reproductores presentes en ambas muestras.
—¿Cómo piensa la selección?
—La selección animal descansa en tres pilares básicos: el estudio del pedigrí, lo que indica lo que un individuo” debería ser”; la apreciación visual, la que indica lo que el individuo “parece ser” y la evaluación genética o prueba de progenie, la que indica lo que el individuo “realmente es” para cada una de las características de producción evaluadas.
—¿Cómo encara la tarea en la pista?
—Es importante implementar un plan bien organizado pero flexible, enfatizando aquellos caracteres fenotípicos que hacen al ganado funcional. Para la jura en pista, el estudio del pedigrí está descartado, la evaluación genética es una gran herramienta para corregir características productivas en los planteles y a través de ellos en el sector comercial. Los datos objetivos deben ser utilizados con cautela, a ningún jurado le gusta que una máquina le diga cómo debe jurar, pero no debería tener problema alguno en permitir que una computadora le diga aquello que él no conoce. En cuanto a la apreciación visual, no voy a buscar ni grande ni chico, voy a buscar bueno y si lo bueno es moderado, mejor. Mucho se ha hablado y escrito sobre el tamaño ideal para las distintas razas, creo que el tamaño ideal no existe, depende del medio ambiente y sobre todo del sistema de producción a aplicar por cada ganadero en función de sus objetivos productivos.
—¿Qué buscará?
—Vamos a buscar animales: armónicos, balanceados, sólidos, carnudos, crecedores y de desplazamientos fáciles. La armonía, el balance y la solidez estructural son fundamentales para asegurar permanencia en los rodeos de cría a la vaca y larga vida reproductiva a los toros. El Aberdeen Angus como raza de carne que es, debe ser necesariamente carnuda, con volumen y profundidad; crecedora, con buena ganancia diaria y un adecuado nivel de engrasamiento. Todo esto sujeto a la facilidad de desplazamiento, que sin dudas es la clave en esto de aventurar estabilidad y permanencia de los reproductores por muchos años en los rodeos de cría.
¿Qué debe tener un Angus ideal?
Antes que nada, el tipo animal debe estar encuadrado dentro del estándar de la raza. Dentro de ese estándar, el toro debe parecer un toro y la vaca parecer una vaca. Además de las características definidas en el estándar racial, los caracteres sexuales secundarios de cada sexo deben estar bien definidos. Sin entrar a repasar el estándar de la raza lo que vamos a buscar en ambos sexos es: cabeza chica, cuello largo, con una buena inserción de paletas, musculosas pero que no protuberantes, procurando función y facilidad de parto. Largo de tronco, lomos anchos y firmes, buenas caderas, llenas de carne, cuartos anchos y bien descendidos (calzonudos). Miembros fuertes, bien aplomados, articulaciones con buena elasticidad, libres de vejigas, pezuñas bien desarrolladas, sanas, simétricas y con buena angulación, ni paradas ni apoyando los pichicos. Buen nivel de preparación, sin excesos, sobre todo en las categorías jóvenes, en las que el exceso de grasa antes de la pubertad puede comprometer su futuro reproductivo tanto en el macho como en la hembra.
—Descríbame por sexo.
—En el toro buscamos, además de corrección estructural y todo lo anteriormente detallado, testículos bien desarrollados, acorde a la edad, de buen formato y parejos, prepucios sin exceso de piel. En la hembra, además priorizamos la femineidad, suavidad de líneas y corrección estructural en general. En vientres paridos o con gestación avanzada vamos a exigir una buena ubre, con los cuatro cuartos bien definidos, parejos, nivelados, con buena sujeción a la pared abdominal y 4 pezones de tamaño chico y finos para facilitar la primera lactancia del recién nacido que es fundamental. En una jura subjetiva el “golpe de vista” es fundamental. La primera impresión es clave más allá de que se terminen ponderando virtudes y detalles pero aquellos individuos que más “llenan el ojo” son los que seguramente terminarán encabezando las filas.
¿Cuánta importancia da a los datos objetivos para determinar los fallos?
Todo un tema. En Uruguay la utilización de los DEPS para el mejoramiento genético de nuestros ganados se ha manejado muy bien. Desde el momento en que han estado disponibles para los productores, se han incorporado a la batería de información que disponen los jurados en pista. Esto ha logrado que la famosa “pirámide del mejoramiento genético” funcione adecuadamente, con las cabañas aplicando tecnología y con el consecuente derrame hacia el sector comercial, permitiendo los ajustes adecuados en las distintas características evaluadas para tener una ganadería acorde a las necesidades productivas del país. La correcta utilización de los DEPS por los cabañeros es la salvaguarda para no caer, como ha ocurrido, en la búsqueda de los máximos en vez de priorizar de los óptimos. No es necesario para la producción un ganado que genéticamente sobrepase los límites biológicos aceptables, menos en un país como el nuestro donde muchas veces es caro hasta prender un tractor. Dicho esto, no voy a jurar DEPS. Es importante que estén los datos, es posible que priorice reproductores con datos frente a los que no los tienen. Es preferible algún dato fuera de contexto a no tener ninguna información. El dato a corregir, el productor lo puede manejar, cuando no hay información es una caja de sorpresas. También es posible que en algún caso observe o relegue algún animal con datos objetivos por fuera de los límites razonables en características de importancia económica. El trato será distinto para productos nacidos de transferencia embrionaria cuyos progenitores de no tener descendencia evaluada en el banco uruguayo, no dispondrán de datos propios, lo que imposibilita el cálculo del “DEP pedigrí”.
¿Va a “castigar” el exceso de preparación? ¿Por qué?
Para hacer posible el trabajo, hay que asumir que todos los reproductores han tenido las mismas oportunidades de crianza y un manejo similar. No es posible asumir que a tal o cual individuo se le dio menos de comer, o tuvo menos tiempo de preparación. En la pista de jura, se deben castigar los excesos, todos los excesos, en el caso del exceso de preparación lo castigaré cuando se traduzca en sobrantes de grasa que alteren significativamente la conformación natural del individuo, ya que está indicando la necesidad de un mayor” dressing” en la cuarta balanza de su descendencia, además de las dificultades funcionales que ese exceso de preparación le pudiera ocasionar en la práctica. Ya me referí al exceso de preparación en animales pre púberes y eso puede ser un problema grave. Entiendo que para ser competitivo en pista los animales tienen que estar bien preparados pero el riesgo reproductivo que se corre al sobre preparar terneros y terneras es muy alto y puede ser anti económico.
¿La pista del Prado debe marcar lo que se debe criar en el campo, o las necesidades del campo inducen a lo que se debe buscar en la pista de calificación?
La estabilidad, viabilidad e importancia de las Exposiciones están sujetas a lo que ellas vuelquen al sector productivo, aquí y en el mundo. De no ser así, no deberían tener razón de ser. Uruguay ha manejado muy bien esa interacción entre lo “bonito” y lo productivo, entre el cabañero y el sector comercial. Nuestra aspiración es que, a través de juras funcionales, respaldadas por el ojo y el criterio de jurados criadores, sumados los aportes, cada vez más precisos, de los datos objetivos, cada vez más lo uno se identifique con lo otro. Ya hemos pasado por momentos en los que influenciados por enfoques productivos de regiones muy diferentes a la nuestra y con recursos que nosotros no poseemos, hemos quedado fuera de los rangos aceptables para la producción de carne en nuestro país. En Uruguay los sistemas de producción de carne son a cielo abierto por lo que el sector comercial debe procurar una producción más óptima que máxima.
¿Quiénes le acompañarán en la jura?
Más allá de la responsabilidad y del arduo trabajo que sabemos tendremos por delante, estas jornadas son para disfrutar. Y para disfrutar nada mejor que compartir este honor con quienes han estado codo a codo durante muchos años en el hermoso trabajo de cabaña, cosa que hemos realizado y visto realizar desde el día siguiente al nacimiento. Para eso y repartidos en las dos jornadas de trabajo van a estar junto a mí el Dr. Ignacio Zerbino Vanrell, mi hermano y colega Nacho que ha estado desde siempre al firme en la dirección de la Cabaña. La Dra. Lucía Zerbino Bonnevaux, mi hija y colega Luli, quién hoy está más cerca que nunca de las decisiones cotidianas referentes al funcionamiento de la Cabaña. Alejandro Zambrano Zerbino, mi sobrino Ale, que aparte de su oficio como martillero y consignatario siente fuerte atracción por la Cabaña y todo lo que involucre el mejoramiento animal. Por último, Mateo Barragán Silva, mi yerno Mateo, quién se ha incorporado al equipo aportando su vocación comercial en aras de aumentar el giro económico de la Cabaña. Veremos cómo nos repartimos, por supuesto que la responsabilidad de la jura pasa por mí persona tanto para los aplausos como para las críticas.
El momento y lo que viene.
¿Como ve al sector ganadero del país?
Muy sólido y potente, las exportaciones de carne bovina registran un nuevo récord histórico entre el 1 de enero y el 20 de agosto del presente año. Esto ha generado un aumento del 35% en total de dólares ingresados al país por carne bovina en ese período de tiempo. Así mismo ha aumentado el volumen exportado de carne bovina en un 6% % y el precio por tonelada en un 27,6%, llegando la carne bovina a US$ 6.987 al 20 de agosto del presente año. Estos son guarismos comparativos de los dos últimos años. No fue sencillo ni corto el trayecto para llegar a estos volúmenes de venta y esta demanda por nuestras carnes. Fueron muchos años de cuidar el status sanitario del ganado, mucha actividad en los Institutos de participación público privada que son un ejemplo de Uruguay para el mundo. También jugó su partido la consolidación de la trazabilidad y lo más difícil: ganar la confianza de nuestros clientes de ultramar. Estamos en un momento soñado del sector agropecuario, nuestra obligación es cuidarlo y potenciarlo para que esta región del mundo siga siendo referente en el arte de brindar proteína de la alta calidad producida en forma natural y sustentable para un mundo que crece y es cada vez más demandante. El productor ganadero está demostrando que cuando hay estabilidad en los mercados y en los valores de la hacienda, invierte, produce e incorpora la tecnología necesaria para poder mejorar los índices productivos de sus rodeos y sostener así la cadena cárnica desde el ternero, su primer y más delicado eslabón.
¿Qué proyecta para el segundo semestre?
En el agro el segundo semestre del año es crucial. Es el momento en el que se planifican y resuelven las principales estrategias productivas que se consolidan cada primavera. Es así que desde el punto de vista ganadero es momento de terminar de acomodar las vacas a parir, atender los partos, analizar las terneradas en función de la expectativa generada en el entore anterior, clasificar las vaquillonas de reemplazo, y revisar los toros para decidir la cantidad y el tipo de toro a reponer. Todo esto con la permanente incógnita de la calidad de la primavera- verano, siempre pendiente de la pluviometría que determina el volumen y calidad de las pasturas en el momento de mayor producción forrajera del año y en base a la cual se toman múltiples decisiones a nivel productivo.
¿Qué espera pueda pasar en la zafra de reproductores de primavera?
Siempre fue incierto aventurar el desarrollo de la zafra de reproductores. Este año en particular y con un mercado ganadero estabilizado, todo indica que la demanda de reproductores va a continuar en la tendencia creciente como ha sido en los últimos años. Los criadores cada primavera tienen la oportunidad de reemplazar los toros de descarte por torada nueva que sea capaz de agregar lo que perciban le puede estar faltando a su ganado. Hoy día la oferta de toros es amplia, variada, con los remates de cabaña cada vez más consolidados. La información que acompaña a cada reproductor es muy completa, así como las opciones comerciales y las garantías que ofrecen las cabañas. La elección de reproductores por los criadores pasa básicamente por los mismos principios que utiliza el cabañero: el estudio de los antecedentes familiares, la apreciación visual y cada vez más en las pruebas de evaluación genética. Hace ya muchos años que notamos esa particularidad de reclamar en los reproductores de reemplazo los datos objetivos de las para la mejora de sus rodeos comerciales.
¿Ha sido un buen año para preparar los toros?
En realidad, los toros se preparan en por lo menos 2 años. El primer invierno es muy importante para lograr un buen crecimiento y durante el otoño- invierno siguiente se les da la terminación en base a verdeos con un eventual suplemento de grano. En general las condiciones han sido buenas para la preparación y puesta a punto de la torada. Estamos ya a un mes del inicio de la zafra y los toros se están aprontando de buena forma para hacer su aporte genético, tener buena recuperación post servicio y lograr una buena permanencia en los rodeos.
¿Las vacas y vaquillonas estarán aptas para pensar en el entore?
Con el panorama agropecuario y ganadero en particular de los últimos años, los productores han extremado las medidas para llegar con los ganados en tiempo y forma a los distintos momentos del ciclo ganadero. El entore es uno de los principales de esos momentos y lo que se nota en la última declaración jurada es el aumento en el rodeo de cría, superando con comodidad los 4.000.000 de vacas, con un rodeo cada vez más joven, donde aumenta sistemáticamente el entore de vaquillonas de 2 años. Hay zonas en el país que en este momento están con poco volumen de pasto. Hemos tenido un par de episodios con faltante de agua en el último año que han complicado la puesta a punto de los vientres. A pesar de eso, la tecnología disponible y el interés de los productores en agotar recursos para llegar con el mayor número de vientres al entore lo harán posible.