Pablo Marinho, médico veterinario del noreste del país, hizo referencia a que Cerro Largo (y el noreste del país, en general) no ha sido “tan castigado” por el déficit hídrico como otras zonas del país. Si bien hay diferentes situaciones, en diciembre los ganados estaban en buen estado, los toros trabajando, las terneras lindas, las vacas con buena ubre y hay un bajo porcentaje animales en anestro profundo.
“A medida que avancemos en el verano veremos rodeos más castigados y con más anestro. Predomina el anestro superficial, vacas que no ciclan pero que la podemos sacar de ese ancestro. Un bajo porcentaje de anestro profundo (que se puede solucionar con destete precoz y alimentación diferencial). La vedette de este año, a está altura, son animales con anestro superficial. Si esto no cambia mucho podemos augurar un año de buen porcentaje de preñez”, señaló.
En diciembre, un 50% del rodeo estaba en anestro superficial, de un 15% a 20% en anestro profundo y el resto entre ciclando y preñado.
“Estamos en un año con menos anestro profundo que otros años, el menos complicado de sacar”, dijo.