Las buenas condiciones climáticas han permitido una notable recuperación de la producción de leche particularmente en Santa Fe y Córdoba donde el efecto de las inundaciones de febrero y principios de marzo se habrían limitado a zonas muy específicas. Esta tendencia es la que se desprende de la encuesta que mensualmente realiza el Centro de Industria Lechera (CIL) que releva el comportamiento de los remitentes de las 19 industrias más importantes.
El cambio de tendencia es muy fuerte. Según lo que se venía informando desde el CIL, la remisión de leche de marzo había caído estacionalmente 6,28% en relación a febrero pasado y si se comparaba con marzo del 2014 la caída interanual llegaba a 1,85%, manteniendo el mismo signo negativo de los dos primeros meses del año (2,61% negativo en el primer trimestre en relación al primer trimestre del año pasado).
Pero con la recuperación de los pastoreos y el buen tiempo, el mes de abril vino con un cambio de signo y muy fuerte a contramano de su comportamiento histórico al ser el mes de menor producción estacional.
En relación a marzo, la producción de abril subió 3,53% y 5,63% si se lo compara con el mismo mes de abril del año pasado. También se redujo la caída del año: considerando el primer cuatrimestre de 2015 versus el mismo período de 2014, la producción ahora sólo cae 0,735%.
Considerando la buena relación del precio de la leche en relación a los precios de los concentrados, las muy buenas reservas forrajeras logradas y las pasturas en buen estado, desde la industria se prevé que la producción continuará creciendo de aquí en más y muchos esperan una producción primaveral superior incluso a la registrada el año pasado.