El rubro se encuentra esperanzado en la apertura del mercado americano.
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En el 2016 el rubro ovino tuvo una baja importante en cuanto a exportaciones a Brasil, a la mitad de lo que estaba, que según Jorge Dimu, después del cambio de gobierno se estabilizó pero no creció más.
El broker de carnes dijo, en Valor Agregado en Carve, que para el año que viene esperan un mejor resultado de ventas a Brasil, que es el principal destino para la carne ovina. “Creo que China también va ser un buen mercado”, resaltó Dimu. De igual forma, el operador remarcó que “tenemos que darle mayor confianza al productor porque no podemos mantenernos con 6 o 7 millones de cabezas, tenemos que llegar a lo que teníamos 20 años atrás”.
El especialista dijo que el país vecino “está muy sensible ante cualquier alteridad”, y más allá del cambio de gobierno, la demanda “se mantuvo pareja pero no se ve el consumo habitual para esta época del año y para las fiestas”. Dimu también señaló que ante esta inestabilidad “no se pueden tocar los precios en absoluto, (...) y desde hace cinco meses se vienen manejando los mismo valores”.
Mercado interno. Según el broker, el consumo local siempre se caracterizó por los corderos más bien livianos de 14 o 15 kilos máximo, además, indicó que normalmente en esta época del año la demanda “sube por el consumo de los distribuidores y los supermercados”.
De todos modos, el sector ovino está esperanzado en la apertura del mercado americano, pero sin embargo, “personalmente no lo veo como un mercado potencial”.