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Un presidente de Fucrea con las patas en el agua y manos en el campo

Pablo Sánchez Durán tiene 55 años, nació en Nueva Palmira y vive en Carmelo. Es un productor agrícola-ganadero arrendatario en el oeste de Colonia. A fines del año pasado fue electo presidente de Fucrea.

Pablo Sánchez

Pablo Sánchez Durán tiene 55 años, nació en Nueva Palmira y vive en Carmelo. Es un productor agrícola-ganadero arrendatario en el oeste de Colonia. Tiene una hija de 18 años que estudia veterinaria. Es hincha del Club Atlético Iberia de Nueva Palmira. Es un apasionado de la natación y de los deportes en general. Nació en la costa del Río Uruguay. Le gusta decir que creció “con las patas en el agua y las manos en el campo”. En el 2000 se vinculó al movimiento CREA como asesor del grupo La Maroma el cual integra hasta el día de hoy como miembro. A fines del año pasado fue electo presidente de Fucrea.

-¿Quién es Pablo Sánchez y cuál es su vínculo con Fucrea?

-Soy Ingeniero Agrónomo, nacido en Nueva Palmira. Comencé a trabajar básicamente en el sistema cooperativo agrícola en mis inicios en 1993 o 1994. Hice un posgrado en Transferencia de Tecnología en Argentina y vine a hacer directamente extensión en el litoral suroeste y siempre estuve vinculado ahí, vinculado al sistema cooperativo de la zona. En el 2000 empecé a ser asesor CREA en el grupo CREA La Maroma, del cual sigue siendo parte no soy asesor, sino que soy miembro con una empresa agrícola-ganadera.

-¿Cuál es el valor de integrar un grupo CREA?

-Después de que uno empieza a trabajar en CREA se da cuenta de que el trabajo en grupo lo que haces es, justamente, agregar valor. La discusión de una vez al mes, juntarnos y que todos trabajemos por una empresa, que todos pensemos para una empresa, que discutamos y pongamos sobre la mesa 10 u 11 miradas diferentes cargadas de experiencias diferentes, dan un valor agregado al análisis de esa empresa incalculable. Después que uno comienza a trabajar y a tomar decisiones de esa forma es casi imposible trabajar sin el método CREA, sin el aporte de nuestros compañeros de grupo, sin la visión y la ayuda de nuestro asesor que trata de congeniar las cosas en común y trata de resaltar y hacernos crecer con las cosas que somos diferentes. En CREA decimos eso: las cosas que pensamos igual nos unen y las cosas que pensamos diferentes nos hacen crecer como personas, empresarios, como seres humanos, como amigos. Para nosotros el método CREA tiene un valor en sí mismo: trabaja básicamente en tener la información registrada para tomar mejores decisiones; ese es nuestro principio y por eso medimos tanto; por eso la gestión es nuestro caballito de batalla; por eso la información es tan importante. Cuando tomamos decisiones la hacemos en base a información certera. Ese es nuestro fuerte.

-¿Cómo está conformada hoy Fucrea?

-Hoy tenemos 53 grupos agrupados en cuatro sectoriales: la ganadera, la agrícola-ganadera, la lechera y la granjera. Son cuatro sectoriales que están integradas por grupos CREA nucleados por rubros de producción. Además, tenemos algunos grupos temáticos, como el grupo corral y el grupo de comercialización que están integrados por integrantes de algún grupo que, además, se juntan por rubros temáticos. Vemos una situación estable, creciendo lentamente en este último tiempo. Fue una decisión institucional: ser más fuertes, pero no más grandes sino ser mejores y hasta esta última etapa nos concentramos en hacer una Fucrea mucho más fuerte y no en una más grande, pero siempre hemos tenido el camino de crecimiento lento y seguro entre nuestros objetivos.

-Para eso, ¿en qué líneas de trabajo específicamente se concentran?

-Si uno tiene que mirar el futuro, nos concentramos en hacer nuestras empresas más competitivas en capacidades de crecimiento, que sean ambientalmente sostenibles, socialmente responsables -eso para nosotros es muy importante-, y humanamente disfrutables. Queremos que nuestras empresas sean el mejor lugar para trabajar: para nosotros, para nuestra familia, para nuestros empleados, para la gente que está vinculada a nuestra forma de trabajo. Es una forma de desarrollo que no vamos a transar. Esto es lo que nos va a mantener vivo en esta próxima etapa de mediano plazo. En esa línea, con esa definición, diría que vamos a hacer hincapié en la gestión económica. Nosotros tenemos que ser mejores en registración y en tener nuestros indicadores más ajustados, por eso definimos y se creó un departamento de gestión mucho más profesional. Entendemos que en el corto plazo vamos a tener eso profesionalmente acorde a la institución que queremos. Tenemos el tema de la gestión ambiental que va a estar sobre la mesa atravesándonos en todos nuestros rubros de producción ahí ya tenemos varios proyectos. Por último, y no menos importante, está la gestión humana. Ahí el trabajo es hacer a nuestros grupos mejores; más fuertes en sus personas. Ese crecimiento humano y el crecimiento de los equipos de trabajo van a ser una de las tres líneas de trabajo principales que estamos intentando desarrollar y que ya empezamos a caminar. Tenemos nuestra primera consultora de gestión humana que está empezando a trabajar.

-¿Cómo observa las diferentes realidades de cada sector, teniendo en cuenta la fuerte sequía que vivimos?

-Terminamos un ejercicio pasado histórico, así lo demostramos en la conferencia de prensa de fin de año. Tuvimos muy buenos resultados en general y en casi todos los rubros, por lo menos en agricultura, en ganadería y en lecheria. Luego caímos rápidamente a la realidad en la cosecha de los cultivos de verano, el cierre del ejercicio en donde tanto los precios de los productos, especialmente el de la carne, sufrieron una caída importante. La sequía es muy grande y nos empieza a jugar un partido fuerte, porque hay que recordar que en los sistemas agrícolas, los sistemas de verano pesan mucho. En la producción de carne ni que hablar porque en la primavera es cuando debemos guardar pasto y nunca dimos tanta suplementación como en esta última primavera, así que estamos un poco amenazados en este ejercicio que viene corriendo.

-¿De qué manera?

-Diría que con costos altos e insumos estratégicos muy altos, que también nos están pegando; una presión al aumento del precio de la tierra, esa ha sido una constante en los últimos años y eso nos hace subir los rendimientos de equilibrio en todas las actividades; con un marco internacionales que tiene incertidumbre, eso está a la vista; hay una baja de expectativa de crecimiento económico, una amenaza de recesión, una alta inflación y eso nos pone en un marco de amenazas, pero existe un considerable margen de mejora para nosotros. En sí, viendo por el lado de las productividades, tenemos una gran diversidad dentro de nuestras empresa y eso nos da una gran oportunidad de mejora: hay un camino de crecimiento para amortiguar, digámoslo de esa manera, esos vaivenes del sector productivo que trabajamos y estamos acostumbrados. Los incrementos de la productividad requieren inversión, eso se está dando y hay que cuidar los equilibrios entre la variabilidad productiva y los riesgos financieros que es lo que ahora estamos tratando de desarrollar con la mejora en nuestra gestión. Por ese lado vamos.

-¿Perspectivas?

-En ganadería, la caída estrepitosa de los precios y la dificultad de aumentar la producción por una primavera seca nos va a poner en resultados que volverían a ser los del año anterior: un 2020/21, pero con un stock ganadero que vale menos de lo que teníamos, es decir, una pérdida patrimonial relativamente importante. En agricultura, los agrícolas-ganaderas con seca tuvieron un invierno bueno, pero dependemos de los rendimientos de cultivos de verano que en el promedio de los últimos 10 años, volvemos a los ingresos promedios de los últimos cinco años. No vamos a tener la ilusión que tuvimos el ejercicio pasado. Los lecheros están con precios relativamente sostenidos a pesar de los costos crecientes traccionados por la seca y aumentos de insumos, y se visualiza un resultado que está un poquito por encima del promedio de los últimos 10 años. En el caso de los vitivinícolas y frutícolas queda bastante por definir: una cosecha de sus frutos están en pleno desarrollo, así que es el que menos podemos opinar, además de que es el rubro que menos sé… (risas)

-¿Cuáles son las necesidades que tienen hoy las empresas CREA?

-Hoy necesitamos contar con mejor y más clara información por eso las líneas de trabajo están definidas para superar las dificultades que nuestros miembros nos dicen. Los primeros días de febrero tenemos el cónclave donde juntamos a todos los referentes de la institución, los presidentes de las sectoriales, los asesores, el consejo directivo, nuestro coordinador general y definimos el foco para este próximo año. En principio, diría que donde tenemos nuestras patas, a pesar de que Fucrea es la referente en gestión, entendemos que todavía tenemos mucho por hacer. Como dice Mario Fossatti: la esencia del movimiento CREA es la insatisfacción permanente, es decir, siempre estamos insatisfechos con lo que hacemos y eso nos hace movernos. Para nosotros eso es clave: tenemos que seguir apuntando a la mejor información. No hay forma de tomar decisiones sino tenemos una buena información detrás que sea discutida en grupo, por eso es qué hacer funcionar mejor el método CREA para nosotros es una línea de mejora continua y constante porque nuestras empresas cambian, nuestros grupos cambian, el mercado de nuestro entorno donde nos movemos cambia permanentemente y esa es una definición que la tenemos: el tema ambiental es una constante hoy en día tenemos que hablar con propiedad de los temas ambientales y para eso hay que medirlos. Le agrega un factor más a la gestión. Esa es una dificultad que tenemos que poner arriba de la mesa como una gran oportunidad. Ver si no es una nueva oportunidad para agregar valor en el corto plazo. Esa es la línea de trabajo.

-¿Un mensaje final?

-Primero agradecer a los miembros CREA que hacen posible que la institución siga desarrollando líneas de trabajo para ser mejores empresarios y mejores personas. Estar en un grupo CREA seguramente nos puede hacer crecer como empresarios, pero seguro que después de entrar a un grupo, discutir y conversar durante mucho tiempo nos hace mejores personas y eso es un valor intrínseco que tiene que ser rescatado y traspasado al resto de la sociedad. Primero: invitamos al resto de los actores del medio a vincularse. A que se animen a acercarse al movimiento CREA, a que pregunten, consulten y nos llamen. Segundo: cruzamos las fronteras de nuestro medio. Existen dos grupos que utilizan métodos CREA en institutos de educación. Son los grupos CAM: crecer, aprender y mejorar. Nos han enseñado muchísimo a cómo el método CREA puede ser aplicado en cualquier tipo de empresas, inclusive las educativas y eso es una gran satisfacción.

Es Licenciada en Comunicación, egresada de la Universidad ORT en 2017. Trabaja en Rurales El País, sección a la que ingresó en agosto de 2020. Antes fue periodista agropecuaria en El Observador y productora en el programa radial Valor Agregado, de radio Carve. Escribe artículos para la revista de la Asociación Rural y se desempeña como productora del programada #HablemosdeAgro, que se emite los domingos en Canal 10.

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