Nacho Lussich: “Los Criollos uruguayos están en su mejor momento histórico”

Entrevista con el jurado más joven del Freno de Oro

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A los 32 años, Ignacio Lussich se convirtió en el jurado más joven del Freno de Oro, una prueba que tiene más de 4 décadas seleccionando a los mejores caballos Criollos del mundo. La suya es una historia de pasión por la raza y de mucho estudio de los caballos, que le atrajeron para siempre cuando hace 20 años fue por primera vez a una definición del Freno en Esteio junto con su padre y su hermano. Una historia de amor a la raza de un chico nacido en Montevideo, que estudió primero en el Christian y luego se recibió en Licenciatura en Administración de Empresas en la ORT. Que incluso se acrecienta más porque su familia no tenía vínculos con los caballos hasta el año 2001… Ahora, fue uno de los tres jurados internacionales en jurar la mayor competencia de los Criollos. Estuvo tres días concentrado en su tarea. Y no sólo eso, la pasión y profesionalismo con que lo hace queda de manifiesto en el hecho que luego, cuando llegó a su casa, se vio la grabación de toda la prueba de nuevo… O sea, la de Nacho Lussich Monestier, es una historia que merece ser contada.

-¿Cómo empieza tu vínculo con los caballos?

-En el año 2001, un hermano mío fue a una cabalgata en el campo de un amigo y quedó copado. Al año siguiente fue nuevamente, acompañado por mi padre y quedaron muy entusiasmados. Ese año, fueron al Prado y compraron un Cuarto de Milla: “Copenhague Fuego”, que lo disfrutábamos los fines de semana entre todos. Hasta que un amigo de mi padre (Luis Muxi) le dijo: “tenés que probar un Criollo” y nos regaló 7 yeguas, una para cada integrante de la familia. Eso fue en el 2003, hace exactamente 20 años.

-¿A dónde fueron esas 7 yeguas?

-Tenemos una chacra en Punta Ballena, donde nació la cabaña L’Abadía.

¿Ahí nació tu pasión por los Criollos?

Sin dudas. Ya en 2004 fuimos como espectadores por primera vez a la final del Freno en Esteio y también fuimos a Palermo. Ahí quedé impactado.

-¿Qué te atrajo?

-La parte funcional. Es que se vibra distinto que la morfología, cuando rayan, cuando giran, eso nos prendió.

-¿Cómo siguieron en la cría?

-En L’Abadía seguimos incorporando y seleccionando pensando en sangres funcionales, sin descuidar nunca la parte morfológica, por algo tiene un peso importante en el Freno, objetivo que no descuidamos nunca. Siempre intentando tener caballos lindos, pero funcionales: que sean mansos, inteligentes, con facilidad para girar, para moverse. Soy muy estudioso de la genética. El Freno tiene 40 años y la genética que funciona la conocemos y nos tiramos por ahí.

-¿Cómo es la producción que hacen en L’Abadía?

-Cada año se preñan tres yeguas, las conocemos mucho, sabemos lo que dan, qué tipo de padrillos hay que incorporar. Y somos competitivos. En el 2021 clasificamos una yegua para el Freno, la “Ballenera Justicia”, hija de una de las 7 yeguas con que empezamos la cría. Después no fuimos por problemas ajenos. Incluso estaba clasificada para esta Ficcc, pero por lógica (por ser jurado), no pudo concurrir.

-¿Cuándo empezaste a estudiar y saber del reglamento del Freno?

-Cuando una cosa te genera pasión y te gusta, te metés más y más. Cuando era un poco más chico, en vacaciones, competía con mis propias yeguas en las Credenciadoras y te vas metiendo. Para competir como jinete, o propietario, tenés que saber. En el 2011, la primera vez que se hizo un curso de jurados del Freno, yo tenía 20 años y fuimos unas 30 personas, aprobamos una decena.

-¿Cuándo juraste por primera vez?

-La primera Credenciadora que juré fue en el 2014 en San Carlos y fue como dar un examen de Facultad. En estos casi 10 años no paré más.

-¿Qué es para vos el Freno de Oro?

-Es la prueba más completa de caballos que existe. Esto te lo puedo asegurar sin dudas. Con la parte morfológica y las 8 pruebas donde se ven todas las destrezas de los caballos, no hay una prueba igual en el mundo.

-¿Cómo fue evaluar a una leyenda como el Matrero?

-Todos los que lo juramos alguna vez y más ahora después de todo lo que ha hecho, lo conocemos al caballo al detalle. Todos los que estamos involucrados a la raza Criolla lo conocemos bien. Es como cualquiera que patea una pelota de fútbol y conoce a Messi. Ya conocemos sus virtudes y sus defectos, pero una vez que entró en la pista te olvidás. Como jurado quiero que me vaya bien a mi primero y que en la prueba pase lo que tiene que pasar. Además, todos los que estaban en la Ficcc estaban clasificados por lo que hicieron. Ya los conocíamos, pero estamos jurando una prueba donde todos empiezan de cero.

-¿Presiona el magnetismo del caballo con el público?

-Todos somos apasionados por el Matrero. Es el mejor caballo de la historia del Freno de Oro y va a ser muy difícil que lo superen. Pero cuando entra en la prueba no hay antecedentes. Se evalúa estrictamente lo que hace allí. Tenía que ir a demostrar, otra vez, que es un fenómeno. Y demostró. La Plata es un premio impresionante. Y más aún, con la Plata que logró la “Lasqueña”. Todos somos unos privilegiados en haberlo visto. Yo vi todas las pruebas que compitió, pero ahora vale su producción.

-¿Qué te pareció la paridad de los caballos de la región?

-Es una realidad, los uruguayos a veces tenemos el complejo del paisito, que somos menos. Pero ya hay dos jinetes uruguayos que se subieron al podio en Esteio y son 5 los caballos. Competimos de igual a igual en cualquier prueba de la raza hoy. Ese complejo que tenemos que somos menos, porque somos pocos, en la raza Criolla no va. Tenemos un nivel espectacular de los animales, de los jinetes, de jurados.

-También hubo mucha coincidencia en la jura trinacional…

-Es que los tres (con Carlos Loureiro de Souza de Brasil y Rodrígo Díaz de Vivar de Argentina), hace mucho tiempo estamos en esto, competimos, participamos sea como jurados, propietarios, etc. y te vas haciendo el ojo. Los tres juramos hace más o menos el mismo tiempo, por ahí tiene alguno más pruebas juradas.

-¿Qué proyectas para la raza?

-La participación uruguaya en esta Ficcc fue muy superior a la de 2018 en Esteio. Eso muestra que la raza está creciendo en Uruguay y se encuentra en su mejor momento histórico lejos. Tanto jinetes, como criadores y jurados estamos más capacitados y se está invirtiendo en genética y en estructura como nunca se hizo antes.

-¿Qué te dejó este Freno Ficcc?

-Cuando me llaman y me designan para jurar una prueba de lo que sea es un orgullo impresionante. Imagínate una Ficcc, en Palermo y los 100 años de la Asociación de Criadores de Argentina. Palermo es el Bernabeu de los Criollos. Es la catedral de la raza. Y ser designado para esta prueba, representando a todos los jurados uruguayos fue imponente. Todos me escribieron, me llamaron, me desearon suerte, que me merecía y entré con el pecho inflado que tenía que estar tranquilo. Porque hace 20 años no me conocía nadie, me parecía imposible y ahora ser el jurado Ficcc en Palermo es un sueño.

Foto: Pepe Frade del Portillo

Tips para entender el Freno de Oro con el jurado más joven de la Ficcc

Ignacio Lussich es un estudioso de la prueba, lo que le valió para ser elegido y convertirse en el jurado más joven del Freno de Oro. Acá, nos explica cómo se juzga cada instancia de la prueba.

Morfología. En todas las juras de Criollos, lo primero que hay que respetar y no se negocia es el Sello Racial. Un Criollo tiene que parecer un Criollo. Después el equilibrio en sus proporciones. Luego, los aplomos son fundamentales, y las líneas superiores, cuello, angulaciones. La morfología 10 es un ideal, todos los caballos tienen algo que podía ser un poco mejor. El ideal está en mi cabeza, me acuesto todos los días pensando en ese caballo. La que estuvo más cerca de ese 10 fue una yegua brasileña: Oraca do Itapororó y también el cuarto ahora de Ficcc, Mais que Um Magistrado que tuvo 9,5.

Andares. Tranco, trote y galope. Hay que ver la comodidad y la progresión que tienen y es fundamental que cada uno se respete. Sobre 15 puntos, el tranco vale 4, el trote vale 7 y el galope 4. Porque el trote es lo que se usa más en esta prueba que surgió del trabajo de campo.

Figura. Se evalúa el equilibrio entre la velocidad y la corrección en un recorrido determinado por fardos, donde se ve cómo entra con las patas, los cambios de patas y manos. Se penalizan las reacciones y la falta de velocidad. El ideal es de 15 puntos.

Vuelta sobre patas y Rayadas. Sobre 15 puntos. Son dos giros para cada lado, con apoyo en los posteriores (patas), también cuando más velocidad y corrección recibe mejor nota. Y una rayada para cada lado, tras una corrida de 20 metros y parar frente al jurado. La VSP es sobre 5 puntos y cada rayada ideal también 5 puntos.

Manguera. Es sobre 15 puntos, con aparte (10) y pechada (2,5 cada una). El aparte consiste en mantener dos novillos separados durante 30 segundos (si bien el jurado ya puede dar el puntaje antes evaluando la actitud). Una pechada para cada lado, con 30 segundos para cada una. “Para mi es la prueba donde se ven los caballos buenos. Demuestran en poco espacio los movimientos bruscos que tienen que hacer para apartar y se ve al toque el que está mal domado. En las pechadas se ve la velocidad, el coraje. Por algo es la que más levanta al público en las gradas”.

Campo. También sobre 15 puntos, se corren dos paleteadas, una de cada lado, con 7,5 puntos cada una. La cancha está marcada con 30 metros a la salida del tubo, los 80 y 110 metros. Hay que pasar los 80 y la retomada entre ésta y los 110.

Definición. Los mejores caballos pasan a la prueba final donde realizan una segunda Manguera, la prueba Bayard Sarmento y la de Campo final. La diferencia es que ahora cada prueba es sobre 20 puntos.

Pablo D. Mestre es editor de Rurales. Ingresó a EL PAÍS en el año 1981. Primero desempeñó tareas en el Departamento de Corrección y luego, desde el año 1992, pasó a integrar la Sección Rurales donde fue periodista, productor comercial y hoy se desempeña como Editor. Además, fue fundador y Director de La Vanguardia Melense, trisemanario que se publicó en el departamento de Cerro Largo durante una década. Es también socio director de Mesol Comunicaciones, empresa que lleva adelante, en sociedad con el diario, el Portal Rurales El País y diversas actividades en el sector agropecuario. Es también codirector del programa #HablemosdeAgro que se emite los domingos en Canal 10.