Tendrán 90 días para su instalación.
Frigorífico.
La Nación - GDA | El Gobierno argentino formalizó esta semana en el Boletín Oficial la norma que obliga a los establecimientos frigoríficos a instalar balanzas electrónicas (cajas negras) para verificar kilos y la categoría de hacienda faenada.
La medida había sido anticipada en la reunión que la Mesa de Ganados y Carnes mantuvo con el presidente de la Nación, Mauricio Macri, y forma parte de la política de control del Gobierno contra la evasión.
Según la resolución, se establece "la obligatoriedad de los establecimientos faenadores de las especies bovina y porcina de instalar y mantener en perfecta operatividad al menos un sistema Controlador Electrónico de Faena (CEF) en la balanza del palco de tipificación o en cada balanza en caso de haber más de una".
Allí se define a la balanza electrónica como "un equipamiento electrónico criptográfico, con funciones para registrar imagen, peso, fecha, hora de pesada y posición de cada res o media res pesada -según se trate de bovinos o porcinos- en los puntos críticos del circuito de faena, permitiendo establecer la correspondencia de la numeración correlativa de las reses trazadas con el romaneo de faena y la documentación de origen de las mismas".
Los establecimientos faenadores podrán elegir la balanza y el servicio técnico entre un listado de empresas que aprobará la Subsecretaría de Control Comercial Agropecuario del Ministerio de Agroindustria. En tanto, los frigoríficos tendrán 90 días para instalar las cajas negras una vez que se conozcan los proveedores autorizados. Quien no cumpla con la norma sufrirá la baja en el Registro Único de la Cadena Agroalimentaria (RUCA). En el sector viene trascendiendo que serían tres las firmas que ofrecerían el servicio.