Publicidad

“Todo Uruguay debe reconocerse como si fuera un compartimento”

Vacunar contra fiebre aftosa no debe ser usado como barrera comercial

ovinos, lanares, majada
Corderos. Estados Unidos pide más corderos con hueso y Uruguay es un proveedor confiable.
Manuela García Pintos

“El objetivo de Uruguay debe ser que se reconozca todo el país como un compartimento de alta bioseguridad”, aseguró el asesor privado y durante décadas delegado de la Asociación Rural del Uruguay ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), Dr. Jorge Bonino Morlán.

Uruguay es reconocido como país libre de fiebre aftosa con el uso de la vacunación y por más que demuestra en base a ciencia que no existe circulación viral de la enfermedad, hay países que todavía ponen barreras no arancelarias y trancan el comercio de carne con hueso, escudándose en la prevención del ingreso de fiebre aftosa. “Ningún país debería poner impedimentos comerciales porque se vacunan los bovinos contra fiebre aftosa”, remarcó Bonino.

El compartimento ovino de alta bioseguridad, la herramienta adaptada por Uruguay a sus producciones a cielo abierto, porque el resto de los compartimentos que había en el mundo eran bajo techo, dinamizó el rubro ovino, permitiendo del ingreso de carne con hueso a Estados Unidos. Es una herramienta avalada por el código zoosanitario de la OIE, el organismo que regula las normas sanitarias en el mundo para el comercio de especies y subproductos animales.

El 12 de agosto de 2017, se publicó en el Registro Federal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, la norma permitiendo importar carne ovina con hueso de Uruguay proveniente de los compartimentos de alta bioseguridad y un día más tarde, salió el primer embarque. Hasta entonces, Uruguay ha venido exportando con hueso más de 20.000 corderos y no hubo inconveniente alguno.

“El compartimento ovino de alta bioseguridad es una buena oportunidad de ingreso para los productores ovinos, pero ademas, es una tarjeta de presentación del status sanitario del Uruguay, porque es Estados Unidos el que nos da esta habilitación para carne con hueso, a pesar de ser país libre de fiebre aftosa, pero donde se practica la vacunación”, reconoció Bonino que asesora a todos los compartimentos ovinos que tiene Uruguay.

Bonino recordó que esta herramienta nació de la interacción entre el sector público y el privado, basada en responsabilidad y con el compromiso de toda la cadena ovina. “Los productores y la industria acuerdan precios. El servicio oficial (MGAP) trabaja directamente en las seccionales policiales donde están los compartimentos y es quien los habilita”, agregó el especialista.

La faena de corderos destinados a cortes con hueso para Estados Unidos “sigue a buen ritmo”. Los dos frigoríficos habilitados -Las Piedras y San Jacinto- llevan industrializados unos 3.000 corderos en lo que va del año en curso y el precio acordado con la industria, vigente hasta el próximo mes de abril, resulta interesante para los productores.

“Las perspectivas son muy interesantes. Ahora están entrando muchos corderos a los compartimentos y se están empezando a invernar corderos para entrarlos más sobre la fecha. Hay perspectivas en casi todos los compartimentos de aumentar la cantidad de corderos a engordar respecto al año anterior”, afirmó Bonino.

Para incrementar más la oferta de corderos, las señales que reciben los productores deben continuar siendo favorables, para que puedan invertir. El ovino es un buen negocio y el compartimento lo es más. carne ovina, Estados Unidos, compartimento, Bonino

Se superarían los 30 mil corderos durante 2022

Actualmente existen en Uruguay 15 compartimentos ovinos de alta bioseguridad que están en pleno funcionamiento y otro que está temporalmente detenido. El último en habilitarse fue “Suzy”, de Alberto Calo y compañía, ubicado en Tarariras. Ya está funcionando a pleno. A su vez, según confirmó el asesor privado Dr. Jorge Bonino a El País, hay otros cuatro futuros compartimentos que están cumpliendo con todos los pasos para ser habilitados por la Dirección General de Servicios Ganaderos, que es quien los controla, audita y certifica.

La meta este año es poder superar los 30.000 corderos con hueso a Estados Unidos procedente de los compartimentos de alta bioseguridad que se embarcaron el año pasado. La demanda está firme y Uruguay defiende esta producción que le abrió camino en EE.UU.

Publicidad

Publicidad