El precio del ganado para faena sigue subiendo, con los mejores novillos en el rango de 4,25 a 4,30 U$S/kg a la carne. Las vacas se negocian en el eje de 4,10 U$S/kg. La demanda de la industria frigorífica sigue firme, aunque con disparidad entre plantas. La faena superó nuevamente las 60.000 cabezas en la semana previa, lo que ilustra el intenso nivel de actividad. También hay alta disparidad en la terminación en los lotes, lo que hay que tener especialmente en cuenta al momento de comparar precios.
El regreso de Brasil al mercado chino ya está generando una corrección de los precios que paga China, en el mercado de exportación de Uruguay. Pero el precio del ganado para faena ya ha hecho su corrección y ahora está al alza. De manera que no es esperable una caída por esta noticia. Como se ve en la gráfica adjunta, la industria recompuso sus márgenes en noviembre: el novillo tipo subió a un récord histórico (superando los 1.400 U$S/cabeza) pero el precio al productor bajó, ampliándose el margen industrial. Esto no altera la virtuosa tendencia que se ha dibujado en los últimos años, que muestra que la industria ha trasladado casi linealmente loso aumentos/bajas en el mercado externo, al productor.
GRANOS. En el mercado internacional la semana cerró con variaciones leves, salvo en el caso del trigo con un retroceso de 1% en Chicago. Este grano había protagonizado una suba fuerte y está en proceso de corrección. La tendencia se trasladó al mercado local, con valores por el trigo puesto que bajaron a 265 U$S/ton. Contrariamente, maíz y soja se han afirmado en el mercado local. La soja se está afirmando paulatinamente a nivel global, en la medida que aumenta el precio de la harina (principal derivado).
Para el mercado local de granos (especialmente maíz) surgió una noticia relevante en Argentina, donde el gobierno determinó las denominadas “cuotas de equilibrio” que limitan las exportaciones de grano. La subsecretaría de agricultura del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca fija un volumen determinado por zafra y solo se podrá exportar hasta ese valor. Para esta zafra 2021/22 esos volúmenes se fijaron en 12,5 millones de toneladas de trigo y 41,6 millones de toneladas de maíz. Son cifras cercanas al potencial exportador argentino (no constituyen una limitación drástica como ha sucedido en la carne) pero muestran la intención del gobierno de controlar la oferta interna a como dé lugar, lo que va en contra del interés de los productores. Para Uruguay, esto podría –llegadas las circunstancias- complicar la llegada de grano de maíz desde Argentina, que ha sido importante para sostener la alimentación en la producción animal (carne vacuna, lechería, aves y cerdos).
