Los mercados internacionales de granos culminan el año con un tono firme y marcando nuevos récords

Soja, maíz y trigo alcanzaron máximos para los últimos 7 años, es decir, desde que culminara el anterior ciclo de precios récord (2010-2014). La demanda china por soja sigue firme, mientras la falta de agua en América del Sur le agrega soporte a un mercado que está extremadamente sensible a las novedades del clima.

Además de las cuestiones estrictamente vinculadas a la oferta y demanda de granos, inciden también las circunstancias financieras internacionales, con la tasa de interés en mínimos históricos y el dólar que ha retrocedido sensiblemente (bajó 8% desde junio respecto al yuan chino), todo lo cual incide al alza en los precios de materias primas, entre ellos los granos.

 

En este contexto, el mercado regional suma un nuevo dato alcista. Justo cuando se avanzaba en resolver -luego de varios días- el paro de los trabajadores portuarios y agroindustriales en Argentina, el gobierno vecino decidió suspender las exportaciones de maíz hasta marzo. La decisión respondería a la necesidad de asegurar suministro a las industrias de producción animal (feed lots, avicultura, lechería), aunque nadie se ha proclamado impulsor de la medida, que –una vez más en Argentina- es pan para hoy, hambre para mañana. La misma tendrá un impacto alcista en el mercado local de maíz, que tiene en Argentina su principal proveedor de grano importado. La dimensión de ese impacto está por verse.

HACIENDA. Con poca actividad el año cerró con precios recuperados, con el novillo especial para faena en torno a 3,20 U$S/kg, con poca oferta. Los frigoríficos levantaron el pie del acelerador y los precios detuvieron las subas, a la espera de que el mercado se arme nuevamente en estos primeros días del año. Las vacas tienen mayor demanda, con valores que se mueven en torno a 3,05 U$S/kg.

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