Publicidad

Marfrig logró el tratamiento del total de sus efluentes antes de ser devueltos al ambiente

Marfrig 1.jpg

El grupo Marfrig Global Foods, especialista en la producción de hamburguesas y una de las mayores empresas de carne vacuna del mundo, defendió la importancia de tratar y disponer correctamente los efluentes (residuos líquidos derivados de actividades humanas e industriales), tanto en las operaciones como en la cadena de valor.
Todos los efluentes generados en las diferentes etapas productivas de la operación de la empresa son tratados antes de ser devueltos al medio ambiente. Esto es posible porque el 100% de las plantas de la empresa cuentan con Estaciones de Tratamiento de Efluentes (ETE), estructuras en las que el efluente pasa por tratamientos físico-químicos, seguidos de tratamientos biológicos, para que, al final del proceso, cumpla con los estándares de descarga. requerido por las leyes aplicables.
Fetirrigación. Un ejemplo de disposición adecuada de los efluentes tratados por Marfrig es la fertirrigación. La técnica, cada vez más utilizada para el fortalecimiento de suelos, consiste en una aplicación más eficiente y económica de la combinación de agua y fertilizantes, lo que permite una mayor absorción de nutrientes y una mayor productividad.
Desde 2010, Marfrig promueve la fertirrigación en una finca de 1.200 hectáreas en Tangará da Serra, Mato Grosso, ubicada a 7 km de la unidad de la empresa en el municipio. Este proceso garantiza, al mismo tiempo, una alternativa sustentable a la disposición de efluentes por parte de la empresa y al mejoramiento de los suelos y cultivos en la propiedad vecina.
Cada día se bombean alrededor de 4.000 m³ (un volumen equivalente a cuatro piscinas olímpicas, aproximadamente) de efluentes para fertirrigar una superficie de 250 hectáreas. La técnica ayuda en la productividad de los 50.000 naranjos plantados en la propiedad, que genera de 2.000 a 3.000 litros de jugo de naranja por día. También es responsable de mejorar la regeneración de la dehesa ganadera, muy superior a la de la dehesa no fertirrigada, lo que permite aumentar la tasa de rotación del ganado.
La fertirrigación es una ventaja para el productor, ya que permite reducir la cantidad de fertilización con fertilizantes convencionales. “La materia orgánica y los nutrientes presentes en los efluentes ayudan a mejorar el suelo y el cultivo, además de garantizar un destino sostenible para los residuos generados por la industria”, dice Paulo Pianez, director de Sostenibilidad y Comunicación Corporativa de Marfrig.
A su vez, en Bataguassu, Mato Grosso do Sul, el sistema de fertirrigación también se utiliza en una finca ubicada junto a la planta de Marfrig en la ciudad, que desecha efluentes debidamente tratados como fertilizante en los pastos de la propiedad. A partir de este proceso, iniciado con el actual propietario en 2016, en el área de fertirrigación, el ganado criado en la finca aumenta y puede ganar hasta 700 gramos de peso por día.
“La técnica de fertirrigación en alianza con Marfrig ha sido fundamental para aumentar nuestra productividad y engorde de ganado. Realmente hace la diferencia tener una acción que contribuya a la producción sostenible”, dice Ronaldo Dal Pra, propietario de la finca de suministro de la empresa en Bataguassu.
Avance. Debido al buen desempeño del sistema de fertirrigación implementado por Marfrig en Tangará da Serra y Bataguassu, la empresa pretende extender la práctica a otros estados en el futuro. Las unidades de Alegrete (Rio Grande do Sul) y Chupinguaia (Rondônia) ya tienen proyectos en curso, mientras que Bagé y São Gabriel, ambas en Rio Grande do Sul, están en estudio.
Además, la empresa está invirtiendo en la mejora de su sistema primario -compuesto por equipos y sistemas- en todas las unidades de la operación en Brasil. El objetivo es modernizar aún más el tratamiento de efluentes, que desde un inicio cumplen con los estándares de calidad recomendados por el Consejo Nacional del Medio Ambiente (CONAMA). (Fuente: Eurocarne)

Publicidad

Publicidad