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“Se debería usar más” la hemovacuna contra la tristeza parasitaria

Valeria Gayo Ortiz , directora de la Dilave “Miguel C. Rubino ”, el laboratorio oficial que garantiza la inocuidad de la carne y otros productos que Uruguay exporta al mundo, al igual que la sanidad del ganado en pie que sale hacia algunos mercados

Valeria Gayo Ortíz

Valeria Gayo Ortiz , directora de la Dilave “Miguel C. Rubino ”, el laboratorio oficial que garantiza la inocuidad de la carne y otros productos que Uruguay exporta al mundo, al igual que la sanidad del ganado en pie que sale hacia algunos mercados. Defendió la hemovacuna contra tristeza parasitaria que la Dirección de Epidemilogía viene produciendo desde hace 40 años, ofreciendo una protección de 80%. “Si tengo controlados los hemoparásitos, la presión sobre los garrapaticias bajará” y se evitan residuos.

-En el marco de una lucha más efectiva contra la garrapata del bovino, la medición de resistencia a uno o más principios activos es fundamental para que el productor pueda saber cómo encarar sus tratamientos. ¿Están llegando más muestras a la Dilave para medir resistencia?

-Sí, están llegando más muestras. El año pasado hubo una reunión con las gremiales del agro, donde se trataron diversos puntos para mejorar la campaña contra la garrapata y uno de esos puntos era aumentar la cantidad de testeos para medición de resistencia. En este último año se hicieron más de 130 testeos, pero ese número continúa siendo insuficiente, pese a que se incrementó considerablemente. Es un esfuerzo de la División Sanidad Animal, que es quien está impulsando esto a nivel de campo, pero también de la Dilave “Miguel C. Rubino”, que es quien procesa todas esas muestras y el que tiene un trabajo impresionante.

-¿Qué le diría los productores?

-Que envíen más muestras, que midan esa resistencia. Estamos contentos porque hubo una respuesta de parte del productor, pero seguimos pidiendo que manden más, porque el testeo de la resistencia a los específicos veterinarios es fundamental para poder hacer un correcto tratamiento contra la garrapata. A ciegas no se van a lograr avances.

-La Dilave “Miguel C. Rubino” elabora una de las dos hemovacunas que hay en el mercado contra tristeza parasitaria. ¿Esta herramienta todavía es poco utilizada por los productores”

-La hemovacuna tiene los tres parásitos causantes de la tristeza parasitaria (dos babesias y un anaplasma). Son poblaciones atenuadas de los tres parásitos. Lo que se recomienda es que se le aplique a los terneros, categoría que tiene una resistencia fisiológica hasta los 9 meses de edad. Cuando pasan a ser más adultos es donde está el riesgo de enfermar y hasta de morir. En la tristeza parasitaria hay hasta 50% de letalidad. La enfermedad baja la ganancia de pesos, produce anemia, abortos, etc.. Lo que se recomienda es vacunar a los terneros entre los cuatro y nueve meses de vida. Esos animales tiene que estar en buenas condiciones y no sean sometidos a estrés.

-¿Es una vacuna segura?

-La Dilave “Miguel C. Rubino” ha producido esta hemovacuna desde hace más de 40 años. Tiene una historia dentro de nuestro laboratorio y para nosotros es muy importante. Es una bandera del departamento de Parasitología de la Dilave. Es una vacuna que es refrigerada y se produce una vez por mes. Hay muchos países que ni siquiera tienen la posibilidad de contar con una hemovacuna. En Uruguay la tenemos y hay que utilizarla más, no solo por las pérdidas económicas que causa la tristeza parasitaria a los productores, sino también por los residuos que pueden dejar algunos productos utilizados para combatir la garrapata en el ganado. En esa reunión que tuvimos con las gremiales de productores el año pasado, anunciamos que íbamos a facilitar el uso de esta hemovacuna.

-¿Cómo accede el productor o veterinario a esta herramienta?

-Lo que se hizo fue armar un link dentro de la página mgap.gub.uy, en el que se registra el veterinario y ahí está toda la información. Se sabe desde cuándo será la próxima producción de la hemovacuna, hay bibliografía para informarse, a dónde se la pueden enviar y mucha más información de importancia. Es una vacuna muy barata y cuesta $ 98 la dosis. Es una herramienta que el productor debería utilizar más. Entre junio del año pasado e igual mes de este año se llevan producidas 84.000 dosis, pero está lejos de producir a todo el ganado.

-No es la única hemovacuna contra la enfermedad que hay en el mercado.

-No lo es. Hay otra que es producida por un laboratorio particular, que es congelada (está en nitrógeno líquido y hay que tener ciertas precauciones). En caso de la Dilave es una vacuna refrigerada. En este caso, a partir de que se produce, tiene tres días de vida útil, porque luego no es tan segura. Ofrece una buena protección de los animales vacunados, porque esa protección abarca más del 80%. Es muy buena protección para una vacuna.

-La vacuna de Dilave ¿puede ser pedida sólo para combatir una de los tres vectores que causan la tristeza parasitaria?

-Hay que aclarar que en el caso del anaplasma, no sólo se transmite por garrapata, también se difunde a través de insectos hematófagos, en castraciones y cirugías si se trabaja con material contaminado. Si se necesita solicitarla sólo para anaplasma, también es posible. Como sabemos que es barata, se recomienda en general usar la triple que contiene los tres hemoparásitos. Más allá de que hay que vigilar los animales un vez vacunados, mientras están reaccionando, es una vacuna que no tiene grandes contraindicaciones. A su vez, es un biológico que no deja residuos en productos. Eso es muy importante. Entre el test de resistencia y la cantidad de hemovacunas producidas, el departamento de Parasitología de la Dilave tiene mucho trabajo.

-¿Un mayor uso de esta herramienta podría disminuir la presión que hoy existe sobre los químicos usados para tratar la garrapata?

-Sabemos que está existiendo un uso masivo de piroplasmicidas. En un futuro cercano, se van a comenzar a analizar residuos. Algunos mercados de exportación están pidiendo análisis de piroplasmicidas (Antipirético para el control de la tristeza bobina) y es un producto que tiene 213 días de espera (siete meses). Si podemos usar una herramienta biológica como la hemovacuna, que no genera problemas y evitará muchos inconvenientes ¿por qué no se usa más a nivel de productor y estamos aplicando sobre el ganado un químico que dentro de poco no va a poder ser utilizado? Si tengo controlados los hemoparásitos, vacuno a los terneros todos los años y ese no es un problema, la presión con los garrapaticidas y los piroplasmicidas bajará. La medición de residuos de piroplasmicidas, es un tema que se viene.

-¿Cómo se viene trabajando en el marco del Programa Nacional de Control de Residuos Biológicos sobre carne y otros productos exportados?

-Los mercados son cada vez más exigentes y se incrementó mucho el número de muestras. En el Plan Nacional de Residuos Biológicos, la cantidad de muestras a ser analizadas en el año, dependen del volumen de ganado faenado el año anterior. En este caso en 2021 la faena fue récord y eso se reflejó en el número de muestras. Sí, se vienen nuevos requerimientos de los mercados hacia los que exportamos.

-La Dilave apoya a la División Sanidad Animal en las distintas campañas sanitarias. ¿Qué se viene haciendo en tuberculosis y brucelosis bovina?

-Apoya a la División Sanidad Animal en todas las campañas, pero en tuberculosis ya se está produciendo tuberculina bovina que ya está en campo y tuberculina aviar que está en producción. Son producciones que demoran meses. A su vez, el laboratorio oficial analiza todas las muestras, casos o sospechas en frigorífico o campo. En cuanto a brucelosis bovina, se realizan todos los análisis para las exportaciones de ganado en pie, dependiendo del mercado de destino (especialmente para China). Por otro lado, las pruebas confirmatorias de los laboratorios privados la hace siempre Dilave en sus distintos laboratorios, tanto los del interior como en el central de Montevideo.

-Finalmente. ¿Cuáles son los desafíos de la Dilave “Miguel C. Rubino”?

-Son múltiples, porque es un laboratorio que va desde la evaluación química y biológica de los productos veterinarios, el registro, hasta producción de biológicos, diagnostico, investigación, etc. Hay mucho trabajo por delante. Destacaría entre los desafíos la creación de una Unidad nueva. Es algo que estamos haciendo, que es absolutamente nuevo, en el sentido de organizarlo. Venimos trabajando hace más de un año en la creación de la Uniradd. Es una unidad de registro y análisis de diagnósticos. Tenemos información acumulada de más de 40 años y 54.000 registros de síndromes, enfermedades. Hay mucha información que evitamos se pierda.

Hay 54.000 registros de síndromes y enfermedades

-¿Cuál es la finalidad de la nueva unidad que se lanzará dentro de Dilave “Miguel C. Rubino”?.

- Es una unidad de registro y análisis de diagnósticos de síndromes y enfermedades. Hay mucha información y diagnósticos acumulados desde hace más de 40 años. Todos están georeferenciados y eso es muy valioso.

-¿Cómo van surgiendo esos diagnósticos?

-El laboratorio no solo el central en Montevideo, también con las dependencias en Tacuarembó, Treinta y Tres y Paysandú, tienen una conexión directa con los productores, con las gremiales que los agrupa y con los veterinarios de campo. Además llegan las muestras que envían las regionales de la División Sanidad Animal, que se suman a las que envía el sector privado.

-¿Cuál será el fin de la nueva Unidad?

-Acumulará esa base de datos georefenciada, que se subieron al sistema. El Dr. Fernando Dutra de la Dilave Treinta y Tres será el que estará encargado de esa Unidad, porque es el que más trabajó en este tema. Es una información valiosísima de tantos años y de tantos registros que no queremos que se pierda. Será una Unidad donde trabajarán los patólogos de cada Dilave y en conjunto, porque en general los diagnósticos le llegan al patólogo. Ese profesional es el que deriva después las muestras para la sección adecuada dentro de Dilave. Lo fundamental es seguir manteniendo esta base de datos, trabajar para que no se pierda información, porque hay muchos registros que no pudieron ser salvados en el tiempo. Contrariamente, muchos otros pudieron ser digitalizados.

-¿Cómo será el trabajo?

- Se registra cada evento entre los Dilaves con un lenguaje común y esta base de datos será un tremendo aporte a la sanidad, porque en determinada época del año surgen algunas enfermedades y están georeferenciadas. Ayudará mucho a la prevención de problemas.

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