El sector ganadero uruguayo vive desde hace unos meses un contexto inmejorable. Si bien se avecinan varios desafíos a nivel internacional y ACG en la última semana marcó una leve corrección, los valores del ganado han sido excepcionales para el productor. Las interrogantes son muchas: ¿es sostenible este nivel de precios? ¿Son sustentables estos números de faena? ¿Qué pasa con la inserción internacional y la baja de aranceles? ¿Qué pasará con el mercado de China? En la tercera edición de “La Industria Responde”, El Dr. Alberto González, director de Frigorífico Las Piedras, el Dr. Marcelo Secco, CEO de Marfrig y el Ing. Agr. Daniel De Mattos, asesor del directorio de BPU NH Foods, respondieron a éstas y otras preguntas. Fueron más de 170 las consultas que llegaron por whatsapp para esta actividad organizada por la Asociación Rural del Uruguay, radio Carve y Rurales El País.
China.
“El país asiático ha procesado ajustes internos, y recompuso la importación de carne de cerdo, bajando su precio tanto en la importada como en la producida a nivel nacional”, dijo Marcelo Secco. De todos modos, “la demanda está”, consideró el CEO de Grupo Marfrig. Estamos en plena transición en la composición de valores internos de China con los precios de compra. “Debemos seguir aprendiendo de China”, agregó.
Para el Dr. Alberto González, China va a “contramano” del resto del mundo, sobre todo desde el inicio de la pandemia. “En el primer semestre de 2021 todo el mundo sin excepciones estaba en recesión y China mantuvo o aumentó su crecimiento, y cuando todos comienzan a reactivar sus economías como el segundo semestre de 2021 notamos que China por primera vez puede no demostrar tanto crecimiento en el PBI”. Para esto es clave tener cautela, expresó el director de Frigorífico Las Piedras, porque la tracción que hubo en el pasado para que “esa mesa estuviera servida” no tiene otro argumento que no sea China.
Daniel De Mattos coincidió en que China es responsable del crecimiento de los últimos años de nuestro país en materia de valores y exportación de carne vacuna, principalmente por dos motivos: “no tiene cuotas en volumen para acceder y no tiene aranceles altos”. Esta combinación ha hecho explotar un país que aumenta el consumo de proteína animal y roja. Además, el mercado se ha ido sofisticando y hoy incursiona en productos de mayor calidad. “Sin duda va a seguir siendo una tracción importante para Uruguay”, pero debemos mirar más mercados en Asia y diversificar. “Hay otros mercados con bajo arancel, incluso algunos con cero, y en el sudeste asiático hay 700 millones de personas que están aumentando el consumo de proteína vacuna”, añadió el jerarca del BPU NH Foods.
Faena.
“Va a haber un cambio en la composición del stock, sobre todo en novillos de 1 a 2”, comenzó diciendo Alberto González. “No vamos a tener aquella sangría que hubo hace 3 años en esta categoría por la exportación en pie”. No obstante, el director de Las Piedras dijo que es una gran amenaza el hecho de no tener esa reserva de novillos, porque era “la alcancía que teníamos”. Para poder decir que enfrentamos el futuro con capacidad de respuesta en la producción, hay consenso en que se debe seguir achicando el ciclo ganadero. “Presionar en categorías jóvenes significa inversión, manejo, alimentación y aceleramiento, eso no se logra barato y menos en momentos de altos costos”, expresó. Si logramos sortear esto, tendremos un segundo semestre normal, de post zafra climática pero no de oferta.
En el caso de Las Piedras dijo que “el espíritu es de seguir aumentando la faena. No podemos enfrentar un aumento de costos con disminuciones de actividad. ¿Dónde puedo obtener algo más eficiente que en la propia actividad? Hay que aumentar”, sentenció.
“La intensidad del negocio marca la disponibilidad de hacienda, ya que no hay forma que se tengan tantos novillos a no ser que se le siga con grano”, expresó De Mattos. “En el caso de BPU la actividad se va a mantener o va a subir”, dijo.
“Es difícil ese pronóstico de precio por el ajuste que el mercado mismo hace”, aseguró Secco. “Hay señales claras de querer más kilos, más valor y animales más jóvenes, pero en la actividad no existe plan estratégico de una empresa que piense en ajustar con menor volumen” agregó, en concordancia con sus colegas.
Corral.
“En los últimos años Uruguay fue el país que más volumen colocó en el cupo de Cuota 481 y hoy estamos limitados por las negociaciones de la UE con EEUU, dijo el Dr. Alberto González. “Son dos mercados bien diferenciados y hay reconocimiento de que un ganado siendo más joven y terminado a grano es mucho más apetecible en ciertos mercados”. Para eso, consideró que se debe seducir sobre todo a los de Asia.
Para De Mattos se da una particularidad, y es que si vemos lo que ha ido evolucionando la faena de corral, aumentó a contrapelo de la pérdida de la cuota 481. “Esto se da por la aceleración en los sistemas de producción. La relación flaco-gordo de este año con animales que están dentro del corral favoreció este engorde. No así los precios de los granos”, exclamó.
“Hay clientes ávidos que reconocen el producto uruguayo y tienen fidelidad, por tanto hacen lo imposible en mantener ese flujo que Uruguay ha logrado”, dijo Secco, y en el caso de Asia es más difícil la previsión del riesgo, que es donde está parte del crecimiento que el corral tuvo cuando se perdió la cuota en Europa.
Aranceles.
“El acceso a los mercados es algo que nos desvela, primero porque ha cambiado la composición de los mismos”, mencionó Daniel De Mattos. Por tanto, “hay que mantener los mercados y abrir nuevos, que en eso estamos lentos, intentando penetrar el sudeste asiático, y mejorar el acceso a los que ya tenemos, pero la segunda pata es claramente arancelaria”. Agregó que “bien decía el economista Pereira, que estamos en una trampa que nos aprieta entre el Mercosur y que somos demasiado pequeños como para ser atractivos por nosotros solos”. De Mattos dijo que debemos subirnos a alguno de los acuerdos que hoy están en curso y eso tiene nombre: acuerdo Transpacífico.
“Los aranceles son el punto número 1 en la agenda del complejo y el país lo tiene claro”, argumentó por su parte Alberto González. “Sea el acuerdo transpacífico, el reflote del acuerdo UE-Mercosur o el acuerdo con China para bajar aranceles frente a competidores como Nueva Zelanda o Australia, pero es prioritario”. Consultado por el tema de costos y conflictos en los puertos, dijo que es el número 2 de la agenda. “La industria cárnica es el complejo, que quizás, junto a la lechería, sufre más el conflicto en el puerto porque el 100% de la producción se exporta en contenedores. Hay cargas generales como madera, arroz, cereales u oleaginosos que no se ven tan afectados, si bien sufren también los perjuicios. Nosotros sufrimos los 365 días del año afectaciones por tasas y valores de contenedores” dijo González. Mencionó un estudio realizado por las dos gremiales de la industria frigorífica que muestran que no existe puerto en Latinoamérica más caro que Montevideo. “Los conflictos sindicales enlentecen y perjudican, pero los costos son un tema de todos los días”, dijo.
Secco opinó que es un sector que no es una isla y derrama 6 veces su producto en la economía interna. “Las relaciones laborales también están en agenda. En marco de negociaciones salariales cumplimos, y hay un sector que además en este adelantamiento que el gobierno promovió contempló que es una actividad importante, pero muchas veces somos rehenes de que esa agenda tenga más manejo político que de construcción de relaciones”, dijo el jerarca de Marfrig.
Importación en pie.
“Esa oportunidad (de importar ganado en pie desde Brasil), tiene que ser genuina y todo el proceso poder usufructuarla. No debe ponerse en riesgo lo conquistado”, comenzó diciendo Marcelo Secco. “Ningún subsector debe tener beneficios sobre otros”. Entonces como conclusión afirmó que, “si hay un manejo integral, con habilitaciones y sin poner en riesgo la estrategia sanitaria, se va a hacer”.
De Mattos dijo que Uruguay no es la única región del mundo con países fronterizos con pecuaria y “ninguno tiene impedimento de tránsito de productos para faena, engorde o cría”. Uruguay tiene un status sanitario y uno de los mejores sistemas de trazabilidad que existe. Si no ponemos en riesgo eso, renegociar acuerdos es necesario porque todos los países con los que firmamos no impiden a ningún país que por importar animales no pueda luego exportar”, aclaró el jerarca de BPU NH Foods. “Tiene que ser algo transparente. Si se importa ganado el exportador puede usarlo también”, sentenció.
“El aspecto de Brasil de dejar de vacunar contra la aftosa es un riesgo. En biología el 100% de seguridad es difícil de lograr, y es un riesgo que el país debe considerar”, aseguró Alberto González. “Mientras el virus siga en Latinoamérica es difícil, porque además son decisiones que si bien son avaladas técnicamente son políticas y correr el riesgo sería innecesario”, manifestó. “En la importación coincido con ambos, la forma de Uruguay de crecer es cuidando su status sanitario y que no existan fronteras”, agregó.
Exportación en pie.
“Con estos precios internos es cada vez más difícil” analizó Alberto González al respecto. “La exportación en pie se autorizó en la década de 1990 y tuvo innumerables episodios. A Brasil y Argentina se exportaban papeles, porque allá valía el doble. Con Turquía perdimos 400.000 cabezas, porque al otro año si esos animales estaban en Uruguay se demostró que los costos productivos se cubrían y la industria tenía esa posibilidad de faena”, dijo. “Como herramienta, la exportación en pie siempre tuvo enfrente una connotación económica, nunca fue genuina”, dijo de forma contundente el director de Las Piedras.
“No fue positivo por cómo se dio”, dijo Marcelo Secco. “Fue anacrónico, esencialmente en Turquía donde teníamos desde el punto de vista arancelario un esquema donde entraba ganado y no carne en igualdad de condiciones”. Por eso, “la herramienta es dinamizadora en contextos, pero en ese período no fue así”.
Para De Mattos el fortalecimiento del precio participa, porque hay debilitamientos de los países importadores. “Debemos aprender de eso: depender de mercados concentrados es riesgoso para la exportación de carne. La experiencia de Turquía es muy buena para analizar y no podemos basar cambios estructurales de la ganadería en un mercado que no es transparente y es monopólico”, cerró.
Ovinos.
“Los ovinos van en otro escalafón, pero impulsados por la carne vacuna”, sostuvo el Dr. Alberto González. “Es un consumo más elitista y tiene otra connotación comercial. Lamentablemente hay una monopolización en materia de exportación acaparada por Australia y Nueva Zelanda, el 95% sale de ahí”. De este modo, agregó que “como país asistimos a un problema que es la faena de ovejas, vamos a tener una baja en el stock pero con el aliciente que en ovinos se recupera más rápido”. Como mensaje de cierre, González aseveró que Uruguay debe hacer esfuerzos para entrar en mercados y llegar “con carne ovina con hueso del compartimento Uruguay”.
Apoyos. La actividad contó con el apoyo de ACG, Allflex, Angus Uruguay, Banco Santander, Escritorio Di Santi, INAC, Interagrovial, Insalcor, Frigorífico Saturno, Ormando & Cía. y Tranquera.
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