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Felipe Malfato: “Diferencia de Criollos de Uruguay con Brasil es cantidad, no calidad”

El criador uruguayo, Felipe Malfatto Fleitas, será jurado morfológico de Criollos en la Expointer Esteio que tendrá más de 250 reproductores en las pistas

Felipe Malfatto
Foto: ABCCC

De tradición arraigada a la cría de la raza, el Dr. Felipe Malfatto Fleitas dijo del honor y responsabilidad que significa dicha tarea en un país que en 2022 tiene más de 463,5 mil animales registrados por ABCCC que cuenta con más de 4.000 socios, 16.000 criadores y 65 mil propietarios de caballos. Sobre su tarea, el presente y futuro de los Criollos en la región y en el país, conversó con Rurales El País. Médico veterinario, así como su padre y su esposa, con quien tienen dos hijos: Ana Inés (16 años) y Juan Ignacio (11). Se siente orgulloso de su profesión con la cual le da continuidad al comercio familiar (la Veterinaria que cumple 44 años). La pasión por los Criollos la vive a diario en su cabaña “Tacuarí”, en Cerro Largo, que desde el año 1969 realiza selección en la cría de la raza, “buscando un caballo lindo, bueno y manso que nos guste montarlo tanto para trabajar como para disfrutar en familia”, confiesa. Además, integra las listas 1 de jurados de Brasil y Uruguay (ya fue jurado del Freno de Oro), y es integrante del Consejo Técnico de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay. Lo que sigue es una charla distendida con el Dr. Felipe Malfatto Fleitas.

-¿Qué significa ser jurado de hembras en una Expointer Esteio?

-En primer lugar, significa una distinción y una consideración importante. Es una responsabilidad muy grande ya que son las mejores yeguas del ciclo que pasarán por la pista en la gran final morfológica, que en Brasil mueve una cantidad muy grande de animales. Responsabilidad esta que encaro con mucha tranquilidad, entendiendo que, como todo trabajo de jura, debe ser serio y responsable, pero sobre todo, rigurosamente técnico y sobrio.

-¿Qué busca al ordenar las filas?

-Se trabaja con el standard racial en la cabeza. Partiendo de esa premisa, en yeguas se busca un buen balance entre la fuerza que debe tener un Criollo y la femineidad que obligatoriamente debe exhibir una hembra, un vientre. Luego es importante trabajar no abriendo mano de grandes pilares que deben ser incuestionables en una buena yegua como el sello racial, línea superior, aplomos y angulaciones y un fundamental equilibrio entre todas sus regiones, conformando así un animal de excepción.

-¿Cómo sería el Criollo ideal desde el punto de vista morfológico?

-Criamos y trabajamos con una raza que tiene una diversidad genética importante, que es un patrimonio de nuestra raza y que determina diferentes características fenotípicas y morfológicas. Tenemos animales de una corrección estructural y morfológica importantísimas y que son los que se tratan de reproducir y perpetuar, pero el ideal es una búsqueda constante.

-¿La llamada “morfología funcional” está impuesta?

-La morfología funcional no es ni más ni menos que la aceptación que el animal que buscamos debe tener la morfología adaptada a la función que le queremos dar. Si hablamos de que es una raza de silla, de trabajo y que debe ser un buen montado debe tener características biomecánicas básicas para un buen desempeño. Hemos logrado animales destacadísimos en pistas morfológicas que luego demuestran aptitudes funcionales de primer nivel. El Freno de Oro, que cumple en esta edición 40 años, ha sido una herramienta fundamental como prueba de selección para conseguir ese caballo que todos queremos, lindo y bueno.

-Ud. ya fue jurado de Freno de Oro, ¿Qué diferencias y similitudes tienen ambas calificaciones?

-En la evaluación morfológica (primera parte del Freno de Oro) se buscan exactamente las mismas cualidades que en una muestra de conformación. Está incluso bien claro en el reglamento, estipulando que así debe ser. Luego vienen las pruebas funcionales. En una exposición morfológica los animales entran montados a pista, ejecutando los tres andares, tranco, trote y galope. Debe ser evaluado en ese momento su postura, la facilidad con que realiza los tres aires además de comodidad, avance y naturalidad. Y debe darse mucha importancia a esa instancia en la ordenación de la fila y en las consideraciones finales.

-¿Qué importancia le da al “golpe de vista” en su tarea?

-Le tengo mucha fe al golpe de vista como elemento de evaluación. Claro está que el análisis debe ser lo más minucioso que el tiempo en la pista lo permita, pero la impresión que causa la primera imagen es importante y en lo personal me es útil.

-¿Cómo ve a la raza en la región?

-La raza Criolla vive un momento muy bueno. En los 4 países que conforman la FICCC se multiplican las actividades, crecen las pruebas, se diversifican y permiten que además de criadores un público de usuarios y de consumidores finales accedan y condimenten un mercado que no para de crecer. En Uruguay particularmente, además de las pruebas clásicas como Morfología, Marcha, Freno de Oro, Enduro, se nota un crecimiento impactante de las pruebas de Redomones y Domadores con muchas pruebas y muchísimos participantes, permitiendo nutridas actividades de las Agremiaciones locales y el surgimiento de muchos jinetes nuevos.

-¿Comparativamente cómo cree que está la raza en Uruguay respecto a Brasil?

-La diferencia puede estar en la cantidad, pero seguro no en la calidad. Desde hace ya muchos años el intercambio genético entre los países ha permitido trabajar con las mismas líneas de sangre y por lo tanto equiparar los productos. Hoy se puede ver en Esteio animales premiados hijos de caballos argentinos o uruguayos, en el Prado de caballos brasileros o argentinos y en Palermo de brasileros o uruguayos. Hoy, el caballo bueno es bueno sin importar donde nació. Basta estudiar los pedigree y ver la sana mezcla que se ha hecho para lograr ese caballo que nos llena de orgullo.

-¿Qué proyecta en la evolución genética de la raza?

-Ese intercambio de animales junto a las biotecnologías de la reproducción, hacen que esa evolución sea imparable. De hecho, año a año, nos seguimos sorprendiendo con los animales que aparecen en las pistas, lo que deja en claro el trabajo incansable y la inversión de los criadores en la búsqueda de un caballo Criollo cada vez mejor.

-¿Cómo se imagina el futuro de Criollos?

-Preparándonos. En ese sentido hace un año se formó el Consejo Técnico de la SCCCU. Veíamos la necesidad que los seleccionadores actuantes acompañaran el crecimiento de la Raza, ya que el nivel de animales, eventos, presentación y genética no pararan de crecer y aumentar su exigencia. Está integrado por 4 personas, se está trabajando para calificar y fortalecer el Cuerpo de Jurados de la Raza. Se realizaron hasta el momento dos instancias, una de Actualización y Reciclaje en las espectaculares instalaciones de Pueblo Gaucho de Punta del Este, donde asistieron prácticamente todos los jurados actuantes y una segunda de Capacitación y Formación de nuevos jurados de morfología, hace muy pocos días en la Rural del Prado. Se dará continuidad en la brevedad con un trabajo en los mismos moldes con los jurados del Freno de Oro y posteriormente con los jurados de cada modalidad específica, como Redomones, Domadores, Paleteadas, etc.

Pablo D. Mestre es editor de Rurales. Ingresó a EL PAÍS en el año 1981. Primero desempeñó tareas en el Departamento de Corrección y luego, desde el año 1992, pasó a integrar la Sección Rurales donde fue periodista, productor comercial y hoy se desempeña como Editor. Además, fue fundador y Director de La Vanguardia Melense, trisemanario que se publicó en el departamento de Cerro Largo durante una década. Es también socio director de Mesol Comunicaciones, empresa que lleva adelante, en sociedad con el diario, el Portal Rurales El País y diversas actividades en el sector agropecuario. Es también codirector del programa #HablemosdeAgro que se emite los domingos en Canal 10.

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