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INASE muestra ensayos de campo en maíz

Este viernes 10 de febrero, a las 9:30 horas desde el predio de la ARU en Melilla

Ensayos de maíz en INASE

Bajo el lema "Maíz, la genética a simple vista", el Instituto Nacional de Semillas muestra en un mismo ensayo de campo toda la variabilidad genética que va a salir al mercado y que pronto estará disponible para los productores.

Hace cinco años que INASE conduce la Evaluación Nacional de Cultivares de maíz en la localidad de Melilla bajo un convenio con la ARU. El objetivo de estos ensayos es generar información del comportamiento agronómico de los cultivares en condiciones de producción nacional confiable para la toma de decisiones del sector productivo. Estos datos generados están asociados a rendimiento, ciclo, resistencia a enfermedades y adaptabilidad a diversos ambientes.

La evaluación de maíz se divide en dos usos: maíz para silo y maíz para grano. El primero se evalúa en dos ambientes y en una localidad: con riego y en secano en Melilla con siembras de primera fecha en el mes de octubre. El segundo se evalúa en tres ambientes y en dos localidades: con riego y en secano en Melilla con siembras de primera fecha en octubre, y en secano en Dolores con siembra de segunda fecha a fines de noviembre o principios de diciembre.

En los cultivares de maíces de silo de planta entera se mide y genera información del rendimiento de materia seca por hectárea y, además, se estudia la calidad nutricional como los porcentajes de proteína cruda, fibra detergente neutra, fibra detergente ácido, lignina, entre otros. En el caso que un productor quiera aumentar la energía metabolizable en su tambo o en su sistema ganadero puede incrementar la calidad del forraje eligiendo cultivares con bajo porcentaje de fibra detergente ácido. Además, puede seleccionar aquellos cultivares con alto contenido de proteína cruda y bajo porcentaje de lignina que ayuda a la mayor digestibilidad. También se puede conocer el comportamiento de los cultivares para silo con riego y en secano. En este caso, un dato interesante es la diferencia de rendimiento, si se va a plantar una há de maíz para silo con riego, para tener el mismo rendimiento se necesitan 2,5 há de maíz en secano. Por esto, si se cuenta con la posibilidad de regar, la eficiencia productiva será notoria.

El maíz ha tenido ciertas variaciones en los últimos años, las siembras de primera han venido disminuyendo y ha aumentado la importancia de las siembras de segunda, y por esta razón, los datos de Dolores de segunda fecha serán muy representativos de la realidad. Allí este año se evaluaron 64 cultivares donde existe una variabilidad de híbridos muy grande, de ciclos muy cortos a muy largos, que terminan secando muy tarde el porcentaje de grano. En los ensayos, los cultivares se evalúan contra determinados testigos que son los materiales de referencia que los productores ya conocen y en general, son los más comercializados en el país. Por lo tanto, si un cultivar rinde más que los testigos, tiene alto potencial de producción para estar en el mercado uruguayo.

La adaptabilidad a diversos ambientes es información que también se genera a partir de los ensayos. Existen cultivares que tienen adaptabilidad para ambientes no tan buenos o para ambientes de segunda. En esos casos, el productor o el técnico pueden tomar esa información y seleccionar los que más se ajusten a su sistema de producción, e incluso pueden seleccionarlos para distintas épocas de siembras y determinadas chacras con distintos potenciales. También es posible seleccionar un cultivar de acuerdo al ciclo productivo. Existen cultivares que a unos 140 o 150 días de ciclo ya tienen un 14% o 15 % de humedad en el grano, y hay otros que con esos días de ciclo recién llegan al 32 % de humedad en grano, o sea que van a estar cosechándose unos 20 o 30 días después. Cuando se utilicen estos cultivares en siembras de segunda, en el mes de diciembre, deben analizarse muy bien y calcular el momento en que se estarán cosechando.

En este año con el déficit hídrico extremo, entre octubre y fines de enero llovieron aproximadamente 140 mm y la evapotranspiración fue de 520 mm, por lo tanto, el 70 % del agua que utilizó el cultivo provino del riego y en el caso del secano, fue todo déficit. En relación a esto, el contraste entre el ensayo de riego y secano es muy grande. Existen cultivares con riego que van a posicionarse de forma similar al año pasado, con un promedio de 20 toneladas por hectárea y cultivares en secano que van a tener muy comprometido su rendimiento. Es interesante como en el ensayo de secano se pueden observar cultivares con mayor adaptabilidad, por ejemplo, en el mismo bloque hay una parcela que está bastante verde que obtuvo una correcta polinización y grano formado; y otra parcela pegada, menos verde y otra bien seca, que no toleró las condiciones extremas. Esto da un indicio que hay cultivares que presentan mayor adaptabilidad a la producción en secano.

Luego de repasar parte de la información que se genera en base a los ensayos, hay que destacar que, seleccionar la genética a producir es un aporte tecnológico muy importante y accesible para todos los productores. Contar con el conocimiento asociado sobre la calidad genética es fundamental y por ello INASE conduce estos ensayos para generar información objetiva y confiable para la toma de decisiones que impacten positivamente en la producción nacional.

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