Está finalizando la trilla de arroz de la campaña 2021-22 y continúan las cosechas de soja, con rendimientos que continúan siendo calificados como buenos.
En arroz, a pocas semanas de haber definido el precio para la anterior zafra, que con US$ 12,35 y casi un dólar de sobreprecio por la variedad Tacuarí, marcó el tercer año con números positivos para un sector que lo necesitaba de forma urgente, para resolver problemas financieros estructurales, de inversión atrasada o renovación de maquinaria. El sector arrocero uruguayo venía de una caída de área constante, y las anteriores siete campañas a estas tres mencionadas tuvieron números en rojo, con productores que salieron de la actividad y un endeudamiento creciente.
Con unas 163.800 hectáreas sembradas a nivel país, sobre todo en los departamentos de Artigas y Salto por el norte; Tacuarembó y Cerro Largo por el centro; y Treinta y Tres, Lavalleja y Rocha por el este, registrando un crecimiento de un 15% en superficie frente a la anterior zafra, las cosechas están prácticamente terminadas.
Los últimos datos oficiales de la Asociación Cultivadores de Arroz (ACA), marcan un avance general de 96%, con el norte en un 99%; el este en un 96%; y el centro en un 88%, siendo la última la zona más atrasada de las tres.
Días atrás El País publicaba datos aportados por el Centro de Estudios para el Desarrollo, que establecía que se cosecharán 1.5 millones de toneladas y los valores de exportación superarán los USS$ 500 millones.
Buen cierre. Se espera una muy buena zafra a pesar de la fuerte sequía que comprometió algunas zonas como el norte del país, con chacras abandonadas o con deficiencia de riego. Con algunos aspectos a evaluar, como el golpe de calor en el entero del grano, hay optimismo de superar nuevamente las nueve toneladas por hectárea, tal vez acercándose a unas 185 bolsas por dicha unidad, lo que marca una cosecha que nuevamente estará por encima de la media en la última década. Con desafíos internacionales cada vez más complejos y costos que crecieron de forma importante para la próxima campaña, el sector arrocero uruguayo se encuentra en la oportunidad de comercializar la segunda mayor zafra en volumen de la historia y la mayor de la última década.
Sojas. Por otro lado, volvieron las trillas de soja, que en muchas zonas se habían cortado por las lluvias y los rendimientos continúan siendo buenos.
Según destacó el responsable de producción agrícola de ADP, Diego Guigou, “en ADP va a ser uno de los mejores años en cuanto a productividad”.
Explicó que el promedio de ADP está arriba de 3.000 kilos por hectárea. “En chacras de Soriano está en el eje de 3.400 kilos y en Paysandú, donde el régimen de lluvias pasó alguna factura, está en el eje de entre 2.700 kilos y 2.800 kilos por hectárea”.
Guigou destacó que “son rendimientos buenos” y en el caso de ADP prácticamente el 80% de la soja levantada “ya está vendida. Este año no estaba en los papeles”, afirmó el agrónomo, refiriéndose al buen momento que vive la oleaginosa en cuanto a precios y rendimientos en Uruguay.
En Paysandú los rendimientos son desparejos, dependiendo del nivel de lluvias que recibieron los cultivos. Otros técnicos estiman que el promedio general para este departamento se situará cercano a los 2.400 kilos por hectárea.
El ánimo del productor cambió y muchas empresas pueden volver a levantar la cabeza con estos rendimientos y principalmente, gracias a los precios que la oleaginosa muestra hoy en el mercado internacional.
“El ánimo del productor está super bien, el productor invierte, apuesta a invertir y cambiar la maquinaria cuando puede hacerlo. También había muchas empresas que precisaban sanearse”, reconoció el responsable de producción agrícola de ADP.
También es importante señalar que gran parte de la mejora de precio se la llevará el incremento de los costos de producción, especialmente semillas y fertilizantes. La soja es el principal cultivo de secanagricultura, soja, arroz, ACA, ADP
Prevén crecimiento en áreas de invierno
La prioridad de los productores hoy está focalizada en levantar la soja, pero los buenos precios para los granos, incluidos cereales como el trigo, alientan a crecer en las áreas de cultivos de invierno: trigo, cebada y las variedades de colza, principalmente.
En el caso de ADP, el responsable de producción agrícola Diego Guigou recordó a El País que se viene “con una rotación muy estabilizada, con crecimiento en colza y una participación estabilizada de trigo y cebada”.
La colza, una oleaginosa de invierno que tiene por destino la Unión Europea, viene ganando área en cada zafra agrícola y volverá a crecer a nivel país, impulsada por la demanda de granos y alimentos que está generando la guerra entre Rusia y Ucrania, donde a nivel del viejo continente sigue el temor de no poder alimentar a la población humana y animal.
En el caso de ADP “va a ir subiendo el área de cultivos de invierno. No hay dudas que en colza subirá mucho y también subirá algo en trigo y cebada”, remarcó Guigou. Muchos productores seguirán esa misma tendencia en la próxima zafra de invierno.