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“Déjennos producir”: dura crítica de entidades del agro argentinas

Las cadenas agrícolas de maíz, soja, trigo y girasol fustigaron una resolución que obliga a exportadores a presentar un plan de ventas al exterior y sus movimientos en cuentas bancarias

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Foto: Reuters.

LA NACIÓN (GDA) | “Es inquietante e injustificado que la acusación recaiga siempre sobre el sector productivo, convirtiéndolo en chivo expiatorio de otras prácticas que colaboran a ese proceso y al aumento de precios”.

Tras los últimos anuncios del gobierno argentino en materia de exportaciones agropecuarias, las cuatro cadenas agrícolas (Acsoja, Maizar, Argentrigo y Asagir) pidieron que dejen producir al sector para ayudar a la Argentina y remarcaron que la resolución 60 del Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca, recientemente publicada en el Boletín Oficial, “tiene mucha similitud con las resoluciones que crearon los Registros de Operaciones de Exportación (ROE) en el año 2008”.

La resolución 60 obliga a exportadores de granos, carne y lácteos que no tengan un establecimiento propio anotado en el Registro Único de la Cadena Agroindustrial (RUCA) a presentar un plan de trabajo para las ventas al exterior con volúmenes y destinos y sus movimientos en cuentas bancarias, entre otros requisitos.

En este contexto, en un comunicado titulado “Déjennos producir para ayudar a la Argentina”, dijeron que “la reaparición de estos controles redundantes y burocráticos al comercio agropecuario solo generarán la caída de la producción y el arribo de operaciones encubiertas, tal como sucedió con las producciones de trigo, maíz y carnes”.

“Se continúa echando mano a acciones que erosionan gravemente la confianza y retraen fuertemente las inversiones, tanto las de corto plazo, como también en las inversiones de largo plazo. Al mismo tiempo, que nos posiciona en desventaja frente al resto de los competidores en los mercados internacionales”, describieron en un comunicado.

Las cadenas agrícolas recordaron cuando, al inicio de su mandato, el presidente Alberto Fernández “denominó al campo como un socio estratégico, agregando que su gobierno necesitaba que el campo crezca, porque tiene la capacidad de exportar y traer divisas al país”.

En este sentido, detallaron que por décadas el sector “ha realizado aportes extraordinarios por la vía de una elevada carga impositiva, con la justificación de solucionar las prolongadas y decadentes crisis económicas vividas en nuestro país”.

“Es sabido que el campo tiene la voluntad innata de producir, que en las recurrentes crisis vividas en el país ha colaborado con su producción, poniendo en movimiento el círculo virtuoso de la inversión que genera más trabajo y bienestar a la sociedad”, dijeron.

Por último, afirmaron que la constante y creciente inflación “no se soluciona implantando controles de la producción y acotando la exportación, porque sus orígenes debemos buscarlos en el excesivo gasto público improductivo, en el déficit fiscal y en la elevada emisión de moneda”.

En tanto, Marcelo Rossi, exdirector Nacional de Control Comercial Agropecuario y recientemente desplazado del Ministerio de Agricultura de la Nación, se manifestó a través de Twitter diciendo que la resolución 60 “no era necesaria”, a la que describió como “una locura”.

En rigor, indicó que cuadriplican requisitos y exigen un año antes qué operaciones se van a realizar. “El Estado cuenta a través de la AFIP, la Aduana, el Banco Central y el RUCA con los elementos para ejercer un riguroso control de la subfacturación y del ingreso de divisas que generan las exportaciones”, dijo en Twitter.

“El resultado será mayor concentración y una invitación a la discrecionalidad. Primero exigen producir al 100% y después traban la comercialización. Nadie puede apoyar la subfacturación pero en una relación causa/consecuencia responde a una diferencia en el dólar del 40 al 70%”, añadió.

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