Publicidad

Tecnología para el bienestar animal

Las innovaciones para el agro dominan el Salón de Avicultura y suinocultura de San Pablo.

imagen-kleingruppenhaltung-enriched-colony-11789728-1024x682.jpg

Pablo Antúnez. El País en San Pablo.

imagen-imagen-11789724-noquay.jpg

Bombardeados por las propagandas que promueven una alimentación vegana o más saludable, las que excluyen las proteínas de origen animal, argumentando problemas de bienestar generados por la intensificación productiva, los consumidores en el mundo hacen mayor hincapié en la compra de productos que contemplen las normativas de bienestar animal.

Esa preocupación del consumidor, todavía más fuerte en el segmento de carne aviar y cerdo que en la producción de carne bovina, se verifica en la feria del Salón Internacional de Avicultura y Suinocultura de San Pablo, en las más 200 empresas que están mostrando tecnologías de elite para avicultura y suinocultura.

Los directores generales (CEOS) Mario Lanznater de la cooperativa Aurora, el vicepresidente de BRF, Alexandre Moreira Martins de Almeida y el presidente de operaciones globales de JBS, Gilberto Tomazoni, coincidieron destacar que hace falta que la industria acerque mayor información a los consumidores sobre cómo se produce y cómo se aplican en cada empresa las normativas de bienestar animal dictadas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).

Si bien el consumo de carne y ave continuará creciendo en el mundo entero, las empresas brasileñas apuestan a la innovación de producto y a las certificaciones y la de bienestar animal pesan mucho cuando no se trata de segmentos étnicos de mercado.

El Salón de Avicultura y Suinocultura es el mayor evento del sector de América Latina y las mismas empresas productoras traen a sus productores socios para que vean las nuevas tecnologías y tendencias. Es organizado por la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA).

Si bien en muchos casos se sigue produciendo con aves y cerdos aglomerados en los galpones, muchas empresas brasileñas están utilizando nuevas tecnologías que promueven el bienestar animal y bajan el estrés productivo, muchas de esas tecnologías introducidas desde Alemania, Holando u otros países de elite, ya se están fabricando en Brasil.

Novedades. Entre las muchas novedades, la empresa alemana Big Dutchman, con fábricas en Brasil, promueve en el SIASV una estación de automatizada para la alimentación de hembras en producción colectiva (con animales en libertad dentro de una sala). La estación lee el chip que la chancha lleva en la oreja, abre puertas e ingresa a la máquina para alimentarse. La tecnología está diseñada para llevar una ficha individual de cada animal, saber si está próxima a la parición y cuántos gramos debe comer por día, así que la máquina suelta la ración en el comedero de a 100 gramos. Una vez que comió lo suficiente, abre la puerta, la seca de la sala de alimentación y hasta la deriva hacia la sala de maternidad si está a punto de parir.

Esta tecnología se combina con otro lector que detecta cuando el animal está en celo y próximo para ser inseminada. Si el sistema registra que va determinada cantidad de veces a buscar al padrillo (no tiene contacto con este), está lista para ir a sala de inseminación.

La máquina también mide la curva de alimentación de cada animal, se monitorea desde el celular y sirve para alimentar automáticamente hasta 80 hembras. La empresa arma la granja e incluso entrega el proyecto llave en mano.

La máquina tiene un costo de US$ 50.000 y mientras que en Alemania se utiliza cada 64 cerdas, en Brasil se usa cada 80 cerdas. Una granja promedio en Brasil, maneja 2.000 cerdas de cría.

No faltan las empresas dedicadas a la sanidad y la inseminación artificial de cerdas, técnica ampliamente utilizada en las producciones mundiales más avanzadas porque disminuye la posibilidad de enfermedades infecciosas vinculadas con la reproducción.

Avicultura. En aves también hay muchas novedades vinculadas con las gallinas ponedoras, colecta de huevos, bebederos y comederos automáticos que se limpian solos y descartan agua o alimento contaminado, hoy son moneda corriente entre las últimas tecnologías para la avicultura mundial.

Lo más novedoso y promovido son los cajones para ponedoras, tanto para huevos fértiles, como para huevos comerciales. En el caso de aves en libertad, el cajón de postura tiene alberga hasta 20 aves y tiene un sistema de cintas que transporta los huevos hacia la sala de desinfección ( se desinfecta por luz ultravioleta) luego pasan a las incubadoras. En este caso, va un cajón cada 220 aves alojadas.

En caso de las ponedoras de huevos para consumo, entre otras tecnologías, la empresa holandesa Vencomatic Group, promueve sistemas alternativas para aves en postura pero sin hacinamiento. En su kit de tecnología promueve los cajones de postura común con recolección automática, pero lo más novedoso que entrena a la recría de 10 o 12 semanas de cría a adaptarse a vivir libre y a trepar a los comederos. En esta máquina automatizada lleva 19 gallinas por metro cuadrado y tiene un costo de US$ 70 por ave. Los cajones de postura se utilizan cada 580 aves y tienen 8 bocas.

Composteras. Muy importantes para Uruguay y novedosas a la vez, son las composteras de estiércol. En este rubro hay varias opciones, pero la empresa Renomaq, que fabrica los equipos en Brasil, promueve una compostera que tiene 4 metros de alto por 6 de largo.

El estiércol es colectado en los galpones, va en camión hasta la compostera y una vez adentro, la máquina mueve permanentemente el material, ayuda a evaporar el agua, mueren las bacterias y una vez listo ese compostaje está listo para ser usado en la producción de frutas y hortalizas. En países de la Unión Europea, es usado como cama para el ganado.

La máquina procesa 30 toneladas de estiércol por día y tiene un costo de alrededor de US$ 125.000. Cada una alcanza para compostar el estiércol de 500.000 aves.

Pablo Mestre
Pablo Mestre

Publicidad

Publicidad