Terminó agosto y los granos cerraron con caídas mensuales que reflejan la presión de cosecha en el caso del trigo, así como el cambio en el mercado climático que se dio entre principios de junio y fines de agosto, cuando se terminó de comprobar que el año seco fue solo la compra de un rumor.
Este miércoles se dio el tercer negocio consecutivo al exterior en la semana pero el mercado ya no parece prestar atención a esto como sí lo hacía sólo hace quince o veinte días atrás para mantener la firmeza.
El maíz volvió a caer y sigue tocando nuevos mínimos de los últimos siete años, en base a un excelente estado de los cultivos, a condiciones climáticas ideales, a un mercado sobrevendido y una presión de cosecha que parecería haberse adelantado.
La soja volvió a bajar y sigue rompiendo referencias recientes y de mayor plazo. El mercado va camino a estar sobrevendido también en la oleaginosa, con los compradores mirando casi que exclusivamente lo que sucede en cuanto a la oferta de EEUU, que parece será mucha efectivamente, al tiempo que las noticias sobre demanda ni pican en el menú de indicadores de los operadores.
El trigo volvió a caer, si bien más moderadamente y parecería estar próximo a un piso, con enormes producciones en todo el mundo, con fondos sobrevendidos y con precios que tocan mínimos de diez años un día tras otro.
FIMIX – Agrofinanzas.